Antony Blinken, Secretario de Estado de los Estados Unidos
Crisis en Ucrania
Blinken: «Rusia debe decidir cómo resolver este asunto, nosotros estamos listos para cualquier escenario»
El secretario de Estado de Estados Unidos advirtió que hay dos vías para resolver el problema: una diplomática y otra militar
El secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken puso la pelota en el tejado de Rusia al afirmar este miércoles que con la respuesta que se le ha dado por escrito a Moscú, «es Rusia la que debe decidir como resolver este asunto, nosotros estamos listos para cualquier escenario».
La respuesta que Estados Unidos dio a Rusia por escrito ofrece «una vía diplomática seria si Rusia lo quiere», declaró el secretario de Estado estadounidense.
Blinken confirmó que está dispuesto a conversar con su homólogo ruso Serguei Lavrov «en los próximos días» sobre las «preocupaciones de seguridad que el Kremlin manifiesta tener en Europa del Este».
El secretario de Estado estadunidense agregó que la OTAN debe mantener las puertas abiertas a nuevos miembros como un principio básico de la organización. «Por lo tanto en este tema no hay concesiones al respecto» y «reiteramos nuestro compromiso con este principio».
Hemos dejado claro que hay principios básicos que estamos determinados a mantener y defender, incluida la soberanía y la integridad territorial de Ucrania
Blinken, afirmó que con la respuesta escrita que se le ha dado a Rusia, «la intención es mejorar la seguridad de todos, incluso teniendo en cuenta las preocupaciones de Rusia, siempre que se haga de forma recíproca y de buena fe».
«Ahora depende del presidente Putin. Si Rusia quiere hacer frente [a esta propuesta] de forma seria y propositiva sacaríamos adelante este asunto».
«Nosotros no estamos quietos, podemos caminar y actuar a la vez» señaló Blinken al tiempo que recordó que «priorizamos el camino de la diplomacia, pero estamos listos para sanciones si Rusia opta por la invasión».
Señaló que preparan asistencia para Ucrania para asegurar no sólo su seguridad, sino también su economía al tiempo que prometió estar trabajando para «garantizar el suministro global de energía» en referencia a las preocupaciones europeas en cuanto al suministro de gas.
