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Biden hablando por teléfono con su homólogo ruso, Vladimir Putin, a finales de diciembre de 2021GTRES

Ucrania

Biden y Johnson ven luz al final del túnel de la negociación con Rusia

Los presidentes de Estados Unidos y Reino Unido defienden que existe una «ventana para la diplomacia» en la crisis de Ucrania

Joe Biden y Boris Johnson parecen intentar dar un vuelco a la situación de alarma generada por un posible inminente ataque de Rusia a Ucrania. Ambos mandatarios defendieron que todavía existe una «ventana crucial para la diplomacia», en esta crisis que mantiene al planeta en vilo. La fecha del miércoles como el día D de la invasión no apareció por ninguna parte del discurso.

Biden y Johnson inistieron en que Rusia debe cambiar de actitud y cesar con sus amenazas de facto sobre Ucrania. Una cosa es decir que no va a invadir y otra hacer un despliegue militar descomunal como el que el mundo está viendo en el cinturón de su antiguo territorio, vinieron a decir. En esta línea y tras insistir al Kremlin que cese «en sus amenazas», enviaron un mensaje a Moscú, que cualquier tipo de «incursión adicional en Ucrania» desembocaría en una crisis severa que afectaría no sólo a Rusia sino al resto de la comunidad internacional. El efecto dominó causaría severos daños en Europa pero también en el resto de los continentes.

Ante ese hipotético escenario Johnson y Biden advirtieron, una vez más, que se aplicaría, «un paquete signifcativo de sanciones» si Vladimir Putín termina, como hizo en la penínnsula de Crimea, optando por una «agresión», eufemismo para hablar de invasión pura y dura.

A lo largo de la conversación que mantuvieron, ambos mandatarios coincidieron en la necesidad de que Europa adopte las medidas necesarias para cortar el cordón umbilical de la dependencia energética que tiene con Rusia. No sólo para buscar autonomía frente a una potencia con ambiciones territoriales en el viejo continente sino porque eso, «golpearía en el corazón de los intereses estratégicos rusos».

El presidente de Estados Unidos y del Reino Unido coincidieron también en la imperativa necesidad de reformular o replantearse las posiciones defensivas de la OTAN en el este de Europa.