La OTAN vigila, desde las costas del mar Negro, los movimientos de Rusia en Ucrania

Rusia extiende poco a poco sus tentáculos por Ucrania y estrecha el lazo sobre Kiev. El reconocimiento de la independencia de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk cerró un poco más la pinza rusa sobre su vecino.

En el discurso con el que argumentó esta medida, Vladimir Putin negó el derecho de Ucrania a la soberanía e integridad territorial. En esa estrategia para ahogar a Ucrania, Rusia ha realizado un despliegue sin precedentes en el mar Negro, donde en la última semana ha llevado a cabo maniobras militares con la participación de 30 buques de guerra.

En el mar Negro, Rusia ha fortificado su presencia militar en Crimea, la península que arrebató a Ucrania en 2014 y que anexionó a su territorio. El despliegue ruso en Crimea incluye misiles antiaéreos y antibuque de largo alcance. Rusia también ha incrementado su actividad aérea y naval con unos espectaculares juegos de guerra que el Kremlin se ha preocupado de publicitar en sus redes sociales y medios de comunicación afines.

Asimismo, la flota rusa ha impuesto un bloqueo a los puertos ucranianos al restringir la navegación de amplias áreas del mar Negro.

Preguntado por El Debate, un portavoz de la OTAN afirmó que «todo este despliegue es parte de un patrón de comportamiento que busca la desestabilización. Por eso la OTAN permanece en alerta».

La fuente consultada aseguró que la OTAN se ha adaptado «a un contexto cambiante, y lo sigue haciendo». En ese sentido, aseguró que «los barcos de la OTAN patrullan y hacen ejercicio de forma rutinaria en el mar Negro».

Por lo tanto, la OTAN trata de contrarrestar el aumento de actividad militar rusa en el mar Negro ampliando su presencia, pero de una manera peculiar. «No tenemos barcos bajo el control operativo de la OTAN en el mar Negro».

Sin embargo, «tres miembros de los Aliados, Bulgaria, Rumania y Turquía son estados ribereños, con sus propias fuerzas en la región del mar Negro. También estamos intensificando nuestra cooperación con Georgia y Ucrania para garantizar que el mar Negro siga siendo una fuente de estabilidad».

Además, la Alianza sí que desarrolla una misión de vigilancia aérea de largo alcance que protege los cielos en varias áreas de Europa oriental. En concreto, en los países Bálticos, Rumanía, Bulgaria y los Balcanes Occidentales.

El fortalecimiento del despliegue de la OTAN en el este de Europa, incluido el mar Negro, para hacer frente al desafío ruso en Ucrania incluyen los 2.000 soldados desplegados por Estados Unidos en Rumanía, 1.700 en Polonia y 300 en Alemania.

Alemania, por su parte, ha desplegado 350 tropas adicionales al grupo de batalla multinacional de la OTAN que lidera Lituania, y tres aviones de combate adicionales en Rumanía.

España, por su parte, ha desplegado dos buques de guerra dentro de las fuerzas marítimas de la OTAN y cuatro aviones de combate en Bulgaria para reforzar la misión de vigilancia aérea de la OTAN.

Los Países Bajos han enviado 80 fuerzas adicionales al grupo de batalla multinacional de la OTAN en Lituania y aviones de combate a Bulgaria.

Asimismo, Francia, que lidera la Fuerza de Respuesta de la OTAN este año, también ofreció desplegar tropas en Rumanía como parte de un nuevo grupo de batalla bajo el mando de la OTAN.