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Cuerpo de un soldado ruso abandonadosAFP

500 soldados rusos y casi 3.000 ucranianos muertos, el dudoso balance de guerra de Rusia

Las cifras publicadas por Rusia, Ucrania, y Estados Unidos son completamente diferentes

Tras ocho días en guerra, el ministerio de Defensa ruso publicó un balance de bajas militares, por primera vez desde el inicio de su invasión a Ucrania. Según el portavoz del ejército, Igor Konashenkov, casi 500 militares rusos murieron en territorio ucraniano, y 1.600 resultaron heridos. Sus datos contrastan con los de Estados Unidos y Ucrania.

«Desgraciadamente [...] tuvimos pérdidas», lamentó el general. «498 militares rusos han muerto [...] y 1.597 de nuestros camaradas fueron heridos» en las operaciones iniciadas el 24 de febrero, declaró Konashenkov, en un discurso emitido por la televisión pública rusa. Además, añadió que «las familias de los fallecidos reciben toda la ayuda posible».

Pero estas cifras son inciertas, ya que Ucrania evalúa la situación de manera muy diferente. Según el Gobierno de Ucrania, 9.000 soldados rusos murieron luchando, cifra doce veces mayor que la compartida por Konashekov. Por su parte, Estados Unidos desmiente las declaraciones de ambos; según The New York Times, oficiales del Pentágono afirman que han muerto entre 1.500 y 2.000 militares rusos, y 1.500 soldados del bando ucraniano, pertenecientes a las Fuerzas Armadas de Ucrania, a su guardia nacional, y voluntarios.

«El ministerio de Defensa ruso se ha visto en la obligación de admitir que 498 soldados rusos ya han muerto, y 1.597 han salido heridos en la guerra de Putin», tuiteó la cuenta del ministerio de Defensa de Reino Unido. «La cifra real de aquellos muertos y heridos es casi seguramente mucho mayor, y seguirá aumentando».

Sin embargo, según Rusia, las pérdidas de las fuerzas militares ucranianas se estiman más bien en 2.870 soldados muertos, 3.700 heridos, y 572 capturados, balance optimista a ojos del Kremlin. En cuanto a sus propias pérdidas militares, las fuentes estatales de Ucrania aún no dan cifras. Fuera del campo de batalla, sin embargo, el Gobierno ucraniano sí que compartió el balance de civiles fallecidos: más de 2.000 personas.