Rusia destruye un laboratorio de la central de Chernóbil e incauta material radiactivo

Las incógnitas sobre el estado de la central nuclear de Chernóbil se multiplican y aumentan la preocupación por su seguridad. El complejo está controlado desde el 24 de febrero por las fuerzas ocupantes rusas, que mantienen un absoluto secretismo sobre lo que hacen y deshacen en las instalaciones.

Este miércoles, la Agencia Estatal de Ucrania para la Gestión de Zonas de Exclusión denunció que el ejército ruso destruyó el Laboratorio Analítico Central de la central. En el laboratorio se procesaban residuos radiactivos y se almacenaban muestras altamente activas que «ahora están en manos del enemigo».

La central de Chernóbil es un punto estratégico para los planes de invasión de Rusia. Las instalaciones sufrieron un trágico accidente en el año 1986 cuando se incendió y explotó uno de sus reactores durante unas pruebas.

El accidente provocó la contaminación con dióxido de uranio, carburo de boro y otros componentes altamente radiactivos de una amplia zona alrededor de las instalaciones, lo que obligó a establecer una zona de exclusión de 25 kilómetros y la evacuación de 135.000 personas.

El reactor se encuentra protegido por un «sarcófago» para proteger el reactor siniestrado y minimizar las fugas contaminantes.

Según la citada Agencia ucraniana, el laboratorio destruido tiene un valor de 6 millones de euros. En un comunicado difundido en Facebook se informa de que el laboratorio se construyó en 2015 con apoyo de la Unión Europea en un proyecto de cooperación en el ámbito de la seguridad nuclear con el objetivo de mejorar la infraestructura de gestión de residuos radiactivos.

Entre las funciones del laboratorio se encontraba la identificación de desechos radiactivos en la zona de exclusión de Chernóbil; la investigación de nuevas técnicas para el control y la limpieza de residuos; o el análisis de objetos contaminados de la zona de exclusión.