La reunión 'secreta' entre Blinken y Zelenski en Ucrania

Se cumplen dos meses de la invasión rusa de Ucrania, y en una fecha tan señalada, también marcada por las celebraciones de la Pascua ortodoxa, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el de Defensa, Lloyd Austin, han viajado hasta la capital ucraniana, Kiev, para reunirse con el presidente del país, Volodimir Zelenski. El propio Zelenski anunciaba este sábado la llegada de los altos funcionarios estadounidenses a Ucrania. Estados Unidos, sin embargo, no ha dado ninguna información al respecto hasta que se ha dado por concluida la visita.

A diferencia de otros líderes europeos que sí que han publicitado su visita a Kiev, dejándose fotografiar por las calles de Bucha o Borodyanka, símbolos de los horrores cometidos por el Ejército ruso en Ucrania, perpetrados con chalecos antibalas, los altos funcionarios norteamericanos no se han pronunciado al respecto de este viaje. Unas imágenes, las de los mandatarios europeos, que contrastan con el misterio en torno a la visita de los diplomáticos norteamericanos.

Mientras que desde Estados Unidos no se han querido pronunciar sobre este encuentro –por motivos de seguridad–, el Gobierno de Zelenski no ha dudado en hacer pública la visita. Además del propio presidente ucraniano que adelantaba la visita a Kiev de Blinken y Austin, el asesor de Zelenski, Oleksiy Arestovych, confirmaba esta reunión. «Los estadounidenses están en Kiev hoy. En este momento están hablando con el presidente», reconoció la noche del domingo en una entrevista en Feygin Live.

Una vez finalizada la reunión y ya fuera de Ucrania, fuentes del Departamento de Estado han confirmado tanto a Reuters como Ap, la reunión entre Blinken, Austin y Zelenski. Según apuntan estas fuentes, el encuentro tenía como principal objetivo mostrar el apoyo de Estados Unidos a Kiev e informar al presidente ucraniano del regreso «gradual» de los diplomáticos estadounidenses a Ucrania y el nombramiento de un nuevo embajador.

Además, el país norteamericano, según recoge Reuters, ha prometido una nueva ayuda por valor de 713 millones de dólares para el Gobierno de Zelenski y los países fronterizos con Rusia, que temen que el conflicto pueda escalar hasta sus fronteras. Estados Unidos se ha convertido en el principal proveedor de armamento del Gobierno de Kiev. Desde que empezara la ofensiva rusa, el pasado 24 de febrero, la Administración Biden ha aprobado paquetes por valor de más de tres millones de dólares en asistencia militar.

El anuncio de una nueva ayuda llega cuando la ofensiva rusa en el este y sur de Ucrania se recrudece, mientras que en el plano diplomático las negociaciones siguen en punto muerto. Rusia y Ucrania han celebrado el Domingo de Pascua entre bombardeos. Ciudades como Odesa, Mariúpol, Járkov o Lugansk han sufrido ataques aéreos durante todo el fin de semana. El sábado en Odesa, las autoridades ucranianas denunciaban un ataque con misiles rusos desde el mar Caspio que acabó con la vida de ocho personas, entre ellas un bebé de tres meses. Zelenski reaccionaba a este ataque calificando a los atacantes de «escoria».

La situación en el Donbás dificulta el avance en las conversaciones de paz. El presidente ucraniano ha amenazado con retirarse de las negaciones si Rusia celebra un referéndum en los territorios ocupados o en las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk. Por su parte, el Ministerio de Defensa de Reino Unido ha advertido de que Moscú estaría planeando un «referéndum en la ciudad sureña de Jersón con el objetivo de justificar su ocupación».

Esta ciudad, junto con Mariúpol –ya de facto en manos rusas a falta de un pequeño reducto de resistencia refugiado en el gran complejo metalúrgico de Azovstal–, es clave para poder crear un corredor entre la región del Donbás y la península de Crimea, anexionada ilegalmente por Rusia en 2014. En un discurso desde la catedral de Santa Sofía en Kiev, con motivo de la Pascua ortodoxa, Zelenski ha lanzado un mensaje de ánimo tanto a los ucranianos, como a las tropas que aún siguen haciendo frente al Ejército ruso en Mariúpol, aseverando que «la luz vencerá a la oscuridad, el bien vencerá al mal, la vida vencerá a la muerte».

Moscú denuncia ataques ucranianos en suelo ruso

Rusia ha culpado a Ucrania de bombardear una aldea en la región de Bélgorod. «Ha sido un proyectil que llegaba de Ucrania», ha informado el funcionario local, Vladímir Pertsev, a través de su cuenta de Telegram. Además, durante esta madrugada también se ha registrado un incendio en un depósito de petróleo en Bryansk, según ha publicado la agencia oficial de noticias rusa Tass, aunque no se ha informado de las causas del fuego.

El Kremlin advirtió hace unas semanas de que no dudaría en bombardear «los centros de toma de decisiones, incluso en Kiev» si se producían ataques en suelo ruso. A principios de abril, Rusia acusó a Ucrania de atacar un depósito de petróleo también situado en las afueras de la ciudad rusa de Bélgorod, entre otros ataques reportados por medios locales en ciudades fronterizas con Ucrania.