12 millones de desplazados y refugiados en Ucrania: una crisis que «supera las peores expectativas»

Más de 11 millones de ucranianos han abandonado sus casas, ya sea para buscar protección fuera del país, o para refugiarse en zonas más seguras dentro de Ucrania. Las cifras publicadas por Naciones Unidas indican que 5,2 millones de personas huyeron al extranjero, y otros 6,5 millones se han desplazado domésticamente.

La semana pasada, cuando Rusia inauguraba su segundo mes de ofensiva, el Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU tildó de «asombrosa» la cifra, en la que ya es la mayor crisis de desplazados en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.

Y a principios del mes, cuando el número ascendió a los cuatro millones, la ONU declaró que sobrepasaba sus peores predicciones. Ahora, la cifra es de 5.264.767 refugiados en el extranjero, sin contar a los desplazados internos.

«En menos de dos meses, hemos visto como un cuarto de la población de Ucraniana, más de 11 millones de personas en total, han sido obligadas a huir de sus hogares. Es una cantidad asombrosa de gente», denunció Shabia Mantoo, portavoz del Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU en Ginebra, a la agencia de noticias Associated Press.

Los ataques de Rusia en el este del país, sobre todo dirigidos a la región del Donbás, se han intensificado; con graves pérdidas en el Ejército, y con sus expectativas truncadas, el presidente ruso, Vladimir Putin, redirigió su ofensiva a las autodenominadas «repúblicas» prorrussas Donetsk y Lugansk. Busca hacerse con ellas y crear un puente de tierra con Crimea, que ya anexionó en 2014.

Según las Naciones Unidas, la mitad de los desplazados son niños. Cuando desembarcan en los países vecinos, los refugiados encuentran grandes muestras de hospitalidad, y se les anima a continuar con su vida.

En Polonia, por ejemplo, país que ha recibido a 2.922.978 ucranianos, se les otorga un número de identidad polaco llamado «PESEL», que les permite trabajar, acceder a la sanidad pública, y la educación infantil.

El segundo país al que más refugiados se dirigen es Rumanía, donde se han asentado 782.598 víctimas de esta guerra. Pero lo más desconcertante es que la Federación Rusa, país agresor y responsable de la muerte y destrucción causante de esta crisis de refugiados, acoge a 614.318 ucranianos y es el tercer destino más popular.

Los desplazados internos

La viceprimera ministra de Ucrania, Iryna Vereshchuk, advirtió a los habitantes del este del país que lo evacuaran de cara a las nuevas agresiones rusas, para no poner su vida en riesgo. No está claro cuanta gente pudo huir: la cifra de 6,5 millones de desplazados internos que ofrece la ONU se basa en investigaciones de la IOM (Organización de la Migración) entre el 8 y 16 de marzo. Lo más probable es que el total haya aumentado dramáticamente desde entonces.

Como parte de las pesquisas, la IOM entrevistó a 2.000 desplazados internos. 30 % venían de Kiev, más del 36 % huía del este de Ucrania, y un 20 % vino del norte. Casi un 40 % se encontraba ya en el oeste del país, y un 3 % en Kiev.

Además, descubrieron que solo un 5 % abandonó sus hogares anticipadamente, antes de la invasión. La gran mayoría no lo hizo hasta el inicio de la guerra, o cuando los ataques se aproximaron a sus casas.

La IOM estima que más de la mitad de aquellos desplazados dentro del propio territorio ucraniano son mujeres, y muchas se consideran especialmente vulnerables