Así son las leyes de posesión de armas en Texas, el segundo Estado más permisivo de EE.UU.

Salvador Ramos apenas había cumplido los 18 años cuando decidió comprar dos rifles de asalto AR-15, en una tienda local de Uvalde, estado de Texas. Llevaba poco más de un par de horas siendo adulto, pero pudo hacerse con las armas sin problema alguno, gracias a las relajadas leyes texanas.

Días más tarde, se valdría de aquellos rifles para asesinar a 22 personas en una escuela primaria: 19 niños, ninguno mayor de diez años, y tres profesores perdieron la vida a manos de aquel adolescente con estatus legal de adulto.

De los 50 estados americanos, Texas es el segundo más permisivo en cuanto al control de armas. Su departamento de Seguridad Pública se encarga de emitir una licencia, y cualquiera que cumpla todos los requisitos recibirá su permiso.

Este último no hace falta, sin embargo, para comprar el arma. Texas permite la venta, producción, y ensamblaje de armas de fuego, a cualquier persona o compañía registrada federalmente.

Compra exprés

Si un chico de, por ejemplo, 18 años, decidiera hacerse con un arma de fuego, este sería el proceso a seguir en el estado de Texas.

Lo primero, presentarse en algún negocio local con un documento de identificación. En Texas no existe el periodo de espera entre compra y entrega: el joven entrará en la tienda sin el rifle, y saldrá con él un rato más tarde.

Una vez dentro, el joven cliente tendrá que rellenar un registro de transacción de armas federal, el denominado Formulario 4473. El trámite consiste en responder a ciertas preguntas relacionadas con la elegibilidad. Se exige informar sobre el modelo de arma requerida, nacionalidad, edad, historial criminal, uso de narcóticos y droga e historial psiquiátrico.

Entonces, el vendedor efectuará una verificación de antecedentes in situ, a través de un sistema llamado Verificación instantánea nacional de antecedentes penales, o NCIS en la lengua inglesa.

Una vez superada la verificación, llegó el momento de pagar. Visa, Mastercard, efectivo… recordar el PIN es sin duda la parte más complicada del proceso.

Las reglas de Texas

Si el proceso parece demasiado simple, es porque lo es. Apenas existen en Texas leyes de control de armas, circunstancia altamente criticada por los Demócratas de Biden y muchos activistas internacionales.

En los últimos años, la ley respecto a la posesión de armas, lejos de endurecerse, se ha rebajado . En 2021, Texas eliminó la necesidad de un permiso especial para que alguien de 21 o más años de edad porte un revólver en público. Antes de esta fecha, sí era necesaria la licencia para pasearse armado por el estado.

Como Texas goza de leyes estatales de preferencia de armas, los gobiernos locales no pueden restringir ni regular la posesión o el uso de armas en aquellos individuos que hayan podido comprarlas. El estado tampoco exige verificación de antecedentes en la compraventa privada de armas de fuego.

Luego está el tema de la edad. De 18 a 21 años, el estado puede regular el porte del arma, pero no su posesión. De hecho, la ley federal hace incluso una excepción para los menores, en casos de posesión de armas y munición para actividades particulares, que incluyen el trabajo, los ranchos, la ganadería, la práctica de tiro, y la caza.

Una persona con antecedentes penales puede también poseer un arma, y llevarla consigo. Si tiene más de 18 años, y han pasado más de cinco desde que finalizó su condena o libertad provisional, el exprisionero reconvertido en ciudadano que respeta la ley puede tener su propio rifle, pistola...

En Texas, no es ilegal pasearse pistola en mano, salvo en determinadas ocasiones. Si el arma está expuesta «de manera que cause alarma», se considera «mala conducta» y puede sancionarse. Tampoco se puede llevar dentro de un campus universitario.