Macron, Scholz y Draghi visitan Kiev para reunirse con Zelenski

El apoyo europeo a Ucrania no decrece. El presidente francés Emmanuel Macron, el canciller alemán Olaf Scholz y el primer ministro italiano Mario Draghi han viajado a Kiev en un tren especial que han tomado juntos en Polonia.

Su intención es visitar la capital ucraniana a lo largo de la mañanay reunirse allí con Volodímir Zelenski.

Antes, se desplazaron a la ciudad de Irpín, donde han sido testigos testigos de los crímenes de guerra cometidos por las tropas rusas durante su ocupación del norte de Ucrania.

Los tres mandatarios europeos estuvieron acompañados durante su visita a esta ciudad de la periferia de Kiev por el presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, que también se encuentra en la capital ucraniana.

Irpin sufrió los horrores de la ocupación de las tropas rusas en las primeras semanas de guerra.

Los soldados rusos dejaron un reguero de asesinatos de civiles, al igual que en la vecina Bucha, donde se encontraron fosas comunes con cientos de cadáveres.

Draghi, Macron y Scholz recorrieron en medio de un fuerte dispositivo de seguridad algunas calles en las que se podía ver la práctica totalidad de los edificios dañados por la batalla que tuvo lugar allí en marzo.

«Tenéis al mundo de vuestra parte», dijo Draghi a las autoridades locales. «Hay que ver y conocer todo esto. Os agradezco el testimonio», dijo Draghi al jefe de la administración militar regional, Oleksiy Kuleba.

«Este es un lugar de destrucción, pero también de esperanza. Hemos escuchado por parte de las autoridades ucranianas palabras de dolor, pero también de esperanza y de futuro. Es un pueblo que ha estado unido en la guerra y que puede hacer cosas que quizás no podría haber hecho antes», agregó el jefe del Gobierno italiano.

A su llegada a Kiev, Macron ha asegurado que el viaje de los tres líderes pretende enviar «un mensaje de unidad europea a los ucranianos».

Sin embargo, el viaje empezó con imprevistos. Al poco de llegar a Kiev comenzó a sonar la alarma antiaérea que alerta de bombardeos.

El incidente obligó a Draghi, Macron y Scholz a permanecer en el interior de su hotel hasta que pasara la alerta, lo que retrasó su agenda.

Es la primera vez que los dirigentes de estos tres países acuden a Kiev desde el inicio de la invasión rusa, el 24 de febrero.

El presidente ucraniano, además de ayuda militar, espera de ellos una respuesta a la petición de adhesión de Ucrania a la Unión Europea.

La visita no se había anunciado, pero Macron ya lo dejó caer durante su visita a Rumania el miércoles: «Creo que estamos en un momento en el que nosotros, la Unión Europea, necesitamos enviar señales políticas claras a Ucrania y al pueblo ucraniano en un contexto en el que llevan varios meses resistiendo heroicamente», reconoció el presidente francés.

En unas declaraciones realizadas a la prensa alemana poco antes de llegar a Kiev, el canciller alemán declaró que con su iniciativa «no sólo queremos demostrar solidaridad, sino garantizar también que la ayuda que estamos organizando -financiera, humanitaria, pero también cuando se trata de armas- continuará. Y que continuaremos con ella tanto tiempo como sea necesario para la lucha por la independencia de Ucrania».

El presidente francés, por su parte, señaló que con este viaje los tres mandatarios tratan de dar «un mensaje de unidad europea a los ucranianos, para hablar a la vez del presente y del futuro, porque sabemos que las próximas semanas serán muy difíciles».

Asimismo, el primer ministro italiano, por medio de un comunicado del Palazzo Chigi, insistió en el mensaje de unidad: «Un mensaje de unidad y plena cohesión de los países europeos al condenar la invasión de Ucrania, al sancionar a Rusia y al ayudar a Kiev».

«Los líderes durante la misión abordarán las diversas dimensiones del conflicto. Hará un balance de los últimos desarrollos en la situación de Donbás, pero también un análisis de las fuerzas en el campo y del ejército ucraniano en particular», señaló.