Boris Johnson aterriza de nuevo en Kiev y ofrece entrenar a los soldados ucranianos

Boris Johnson, primer ministro británico, no quiso ser menos que Emmanuel Macron, Mario Draghi, y Olaf Scholz, sus homólogos en la Unión Europea que acaban de abandonar la capital ucraniana.

El premier británico se embarcó en un vuelo sorpresa, y aterrizó en Kiev para demostrar su apoyo al país invadido.

«Estoy encantado de ver de nuevo en Kiev a un gran amigo de nuestro país», escribió el presidente Volodimir Zelenski en Telegram, en tanto que Johnson manifestó en su cuenta Twitter su satisfacción por «estar de nuevo en Kiev».

Es la segunda visita del británico desde que empezó la guerra. Johnson, al que aún persigue el tufillo del Partygate, tenía programada una conferencia del Partido Conservador en Doncaster, pero la canceló en el último momento para presentarse en Ucrania.

Programas de entrenamiento militar

Durante la visita, el líder londinense hizo una oferta difícil de rechazar: propuso a Zelenski fundar un programa especial de entrenamiento a gran escala, en el que Reino Unido podría instruir a 10.000 soldados ucranianos cada 120 días.

El programa, organizado e implementado por Reino Unido, podría cambiar el curso de la guerra al otorgar a las fuerzas de Ucrania las herramientas y conocimientos necesarios para equipararse con Rusia.

Parte del currículo propuesto por Johnson incluye ejercicios y simulacros para los miembros de las Fuerzas Armadas de Ucrania, utilizando la demostrada experiencia militar del ejército británico.

El programa les permitiría «acelerar sus despliegues, reconstruir sus fuerzas, y mejorar su resistencia mientras defienden la soberanía de su país contra la invasión de Rusia», según un comunicado del Gobierno británico.

Si Ucrania acepta la oferta, el proyecto podría involucrar a otros países, que se ofrezcan voluntarios para albergar los entrenamientos.