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La excandidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt apoya decididamente la candidatura de Rodolfo Hernández

Entrevista a Ingrid Betancourt, ex candidata y ex rehén de las FARC

«A Gustavo Petro le han financiado la campaña los testaferros de Maduro»

Este domingo, Colombia se enfrenta a una cita electoral crucial en la que debe elegir entre el «outsider» Rodolfo Hernández y el exguerrillero Gustavo Petro

Ingrid Betancourt volvió a la política colombiana. Mujer coraje, permaneció más de seis años secuestrada en la selva por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Liberada en julio de 2008, en una operación de rescate de película y lejos de sus captores, escribió y publicó Una conversación pendiente, con el ex presidente Juan Manuel Santos.

Aquel secuestro de la guerrilla colombiana frustró su candidatura presidencial por el Partido Verde Oxígeno. Con doble nacionalidad, colombiana y francesa, este año intentó alcanzar de nuevo la Casa de Nariño (sede del Ejecutivo), pero se retiró y ahora apoya la candidatura del ingeniero Rodolfo Hernández.

El hombre que sorprendió en las urnas en la primera vuelta del pasado 29 de mayo este domingo podría cortarle el paso al izquierdista Gustavo Petro y ocupar la presidencia de Colombia.

Betancourt se muestra convencida del triunfo de Hernández frente al exalcalde Bogotá, exguerrillero y amigo de Nicolás Maduro. Aunque tiene «muchas dudas» sobre el proceso electoral de este domingo, está convencida de que «habrá tantos votos por Rodolfo Hernández que cualquier fraude o tentativa de fraude no va a tener éxito».

¿Por qué renunció a sus aspiraciones presidenciales?

–Mi razón para volver a la política colombiana, después de 14 años, fue asegurarme que lográramos tener una opción de segunda vuelta que liberara a Colombia de la corrupción. Mi decisión fue simplemente una estrategia para cumplir con esa misión. Rodolfo Hernández era el único candidato con las banderas de lucha contra la corrupción capaz de llegar a la segunda vuelta y lo logramos.

Por primera vez en Colombia tenemos un candidato sin maquinarias partidistas, sin corrupción, sin alianzas con los partidos tradicionales que puede ser presidente de la República de Colombia.

¿Cuáles fueron sus motivos para apoyar a un outsider como Rodolfo Hernández? ¿Para usted quién es Rodolfo Hernández?

–Para poder transformar a Colombia se necesita un candidato que sea realmente un outsider, pero un outsider en contra del régimen de corrupción que ha venido funcionando en Colombia desde los últimos 60 años.

Rodolfo Hernández es un hombre carismático que logró sintonizarse con los colombianos, con esa Colombia de centro que se identifica con el centro, que no quiere votar ni por la izquierda ni por la extrema izquierda ni por la derecha ni por extrema derecha.

Liberarse de la corrupción es también liberarse de las ideologías

Este es un nuevo momento en la historia de Colombia. Liberarse de la corrupción es también liberarse de las ideologías que han encubierto esa corrupción poniendo a los colombianos a matarse los unos a los otros mientras que los de arriba, los caudillos que manejan la opinión pública como si fuera un títere, hacen que los demás se maten mientras que ellos se reúnen en los clubes.

¿En qué punto está Colombia tras los Acuerdos de Paz con la exguerrilla de las FARC?

–Los Acuerdos de Paz estuvieron frenados por el Gobierno de Iván Duque. Este es el momento de volver a retomar el camino, acelerar la implementación de los acuerdos y avanzar hacia la reconciliación de los colombianos.

La paz en Colombia hoy no es motivo de controversia

Los dos candidatos que están de acuerdo, curiosamente, en que la paz tiene que consolidarse; por eso la paz en Colombia hoy no es punto de controversia, hay un consenso nacional de que hay que fortalecer la paz.

Como víctimas queremos traer el Acuerdo de Paz a lo que se dijo originalmente que iba a ser. Es decir, un Acuerdo de Paz centrado en las víctimas, en darle a las víctimas no solamente justicia y verdad, sino también reparación.

La política colombofrancesa es víctima de los crímenes de la guerrilla colombianaCortesía

¿Podrá Rodolfo Hernández lograr el apoyo de los votantes de derecha con promesas contrarias a la causa provida, la familia tradicional y el combate a las drogas?

–Quienes apoyan a Rodolfo Hernández son los colombianos sin ideología, son aquellos que quieren salvar a Colombia de que el país caiga en manos de un cartel de políticos corruptos que piensan aliarse con dictaduras en el mundo entero.

Esta es la razón por la cual personas de izquierda, de derecha y de centro que, independientemente de esas consideraciones y las políticas que tradicionalmente se defienden en uno u otro sector, hoy se unen para apoyar a Rodolfo Hernández para que Colombia tenga por primera vez la posibilidad de salir no solamente de la corrupción sino también de la violencia y de la pobreza.

Hernández ha dicho que no necesita de instituciones representativas como el Senado. ¿Estas ideas no son antesala de un Gobierno autoritario?

Rodolfo Hernández no ha dicho que no necesitan las instituciones, lo que ha dicho es que no necesita a los congresistas corruptos que están en esas instituciones y lo que ha dicho es que la gobernabilidad va a cambiar.

Los presidentes se han acostumbrado a pagar el apoyo y esto va a cambiar con Rodolfo Hernández

En Colombia los presidentes se han acostumbrado no a tener debates y a buscar consensos sino a pagar el apoyo y esto va a cambiar. Con Rodolfo Hernández vamos a tener una democracia real.

¿Cómo se explica que tanto Rodolfo Hernández como Gustavo Petro hayan rehuido un cara a cara en la segunda vuelta?

–Los debates de la primera vuelta fueron la ocasión de mirar, hasta la saciedad, todas las propuestas de todos los candidatos, pero también fueron la ocasión de evidenciar la inutilidad de esos debates.

Se repite una y otra vez el mismo discurso y finalmente lo único que atraen los debates es una confrontación como si fuera un circo romano en el cual hay que tratar de destruir al adversario con palabras muchas veces difamatorias y con argumentos mentirosos.

El populismo es el que gana en los debates y por eso Rodolfo Hernández prefiere las redes sociales

El populismo es el que gana en los debates y por eso hoy en día el candidato Rodolfo Hernández prefiere simplemente debatir con los ciudadanos directamente a través de las plataformas de las redes sociales, donde la gente le puede preguntar a él directamente qué piensa sobre un problema o cuál es su programa en términos específicos, sin tener que desgastarse al tratar de atacar a muerte a su rival político.

Ingrid Betancourt ha participado activamente en la campaña presidencial de Rodolfo HernándezCortesía

¿Qué papel aspira a desempeñar en un futuro gobierno de Rodolfo Hernández?

–Si Rodolfo Hernández llega a ser presidente, como estoy convencida lo será, Colombia va a tener la oportunidad de cambiar completamente la manera cómo funciona la democracia en Colombia.

Ser parte de ese proyecto es un sueño

Estar ahí, ser parte de ese proyecto es un sueño que se cumple después de 30 años de estar luchando contra la corrupción. Así que en cualquier espacio donde Rodolfo Hernández quiera que le acompañe, para mí será un honor.

¿Qué significaría el triunfo de Gustavo Petro para Colombia y para Hispanoamérica?

–Si Gustavo Petro gana las elecciones sería la consolidación de un régimen corrupto, no habría gran cambio. Habría discursos de izquierda, pero realidades de un régimen corrupto que se viene manteniendo desde hace 60 años sin importar que ideología imperara.

Petro haría entrar a Colombia en una nueva alianza donde priman los dictadores del mundo

Desde un punto de vista internacional el Gobierno de Gustavo Petro haría entrar a Colombia en una nueva alianza donde priman los dictadores del mundo.

¿Entonces Gustavo Petro arrastrará a Colombia hacia el eje bolivariano dirigido por Nicolás Maduro?

–No me cabe la menor duda de que así será, no solamente porque ideológicamente son muy cercanos sino porque también personas que han financiado a Gustavo Petro han sido testaferros de Maduro y sabemos que hay una línea directa de alianzas.

Gustavo Petro ha sido financiado por testaferros de Maduro

También es innegable que con esas alianzas se perpetúa una manera de hacer política disfrazada de izquierda, pero ligada más con la corrupción que con la defensa de los derechos humanos. Eso lo podemos ver en el régimen de Maduro y en el régimen de Nicaragua con Daniel Ortega.