Estas son las condiciones imposibles que Ucrania y Moldavia deberán cumplir para ingresar en la UE
El Tratado de la Unión Europea prevé un proceso de adhesión largo y exigente a lo largo del cual cada Estado candidato deberá emprender profundas reformas de su legislación
El Consejo Europeo dio este jueves 23 de junio un paso histórico al admitir a Ucrania y Moldavia como países candidatos a ingresar en la Unión Europea en plena invasión rusa del territorio ucraniano.
De esta manera, ambos países se suman a Albania, Montenegro, Macedonia del Norte, Serbia y Turquía a la lista de países candidatos.
Además, Bonsia y Herzegovina, Kosovo y Georgia son candidatos potenciales que podrían dar el paso en los próximos años.
Sin embargo, la concesión del estatus de candidatos parece más un gesto simbólico que real, ya que tanto Ucrania como Moldavia cuentan con grandes dificultades que, por el momento, imposibilitan su acceso al club comunitario.
En el caso ucraniano, la guerra con Rusia todavía en curso y la ocupación militar del 30 % de su territorio por parte de las tropas rusas convierte en prácticamente imposible que su candidatura pueda prosperar a corto plazo.
En el caso moldavo, el hecho de que la región de Transnistria, al este del país, lleve décadas ocupada por las tropas rusas también bloquearía el proceso.
También es cierto que Chipre ingresó en la Unión Europea en 2004 a pesar de tener la mitad de su territorio ocupado por el ejército turco. Sin embargo, ambas partes de la isla expresaron su voluntad de unificarse, un proceso que, en este momento, está bloqueado.
Otro obstáculo difícil de sortear es el del Estado de derecho. Tanto Ucrania como Moldavia son democracias muy precarias y están minadas por la corrupción sistémica.
Para poder avanzar en la candidatura, deberán introducir profundas reformas en su legislación, un proceso que, inevitablemente, será largo y complejo.
Temas como la justicia, el respecto a los derechos humanos, la integración de las minorías, etcétera, se prevén como grandes escollos.
En cualquier caso, ¿cómo es el proceso de adhesión y qué requisitos tienen que cumplir los candidatos para lograr la plena integración en la Unión Europea?
El proceso de adhesión de nuevos Estados miembro a la Unión Europea aparece detallado en el artículo 49 y en el 2 del Tratado de la Unión Europea.
El primer requisito es que el aspirante debe ser un Estado europeo que se comprometa con los valores en que se fundamenta la Unión Europea, que se recogen en el artículo 2 del Tratado.
Estos valores son el respeto a la dignidad humana, la libertad, la democracia, la igualdad y el Estado de Derecho. El respeto de los derechos humanos, el respeto de una sociedad pluralista, la no discriminación, la tolerancia, la justicia, la solidaridad y la igualdad entre hombres y mujeres.
Asimismo, los países aspirantes deben cumplir los Criterios de Copenhague, definidos en el Consejo Europeo celebrado en 1993 en la capital de Dinamarca.
Los criterios son «la existencia de instituciones estables que garanticen la democracia, el Estado de Derecho, el respeto de los derechos humanos y el respeto y la protección de las minorías».
También «la existencia de una economía de mercado en funcionamiento y la capacidad de hacer frente a la competencia y las fuerzas del mercado dentro de la Unión Europea».
Por último, «la capacidad para asumir y cumplir de manera eficaz las obligaciones que se derivan de la adhesión, incluidos los objetivos de la unión política, económica y monetaria».
A estos requisitos, el Consejo Europeo, celebrado en 1995 en Madrid, añadió otro que es la obligación de que el Estado candidato modifique su legislación nacional para adaptarla al derecho de la Unión Europea y garantizar que el derecho europeo «se aplique con eficacia a través de las estructuras administrativas y judiciales adecuadas».
Los cuatro pasos de la adhesión
Una vez que el Estado aspirante ha demostrado que cumple, o está avanzando en el cumplimiento, de estos requisitos, inicia un proceso de cuatro pasos.
En primer lugar, debe presentar la solicitud formal ante el Consejo de la Unión Europea, que informa de la solicitud tanto al Parlamento Europeo como a la Comisión Europea y a los Estados.
A continuación, la Comisión Europea emite un dictamen sobre la solicitud de adhesión. Si el dictamen es favorable, la candidatura pasa al Consejo Europeo que puede aceptar o rechazar la solicitud.
Si la acepta, el Estado aspirante pasa a tener el estatuto de país candidato. Ese es el paso que tanto Ucrania como Moldavia dieron el jueves 23 de junio.
Tras cumplir ese trámite, comienza el cuarto paso y el más largo: las negociaciones. En esas negociaciones los 27 Estados de la Unión Europea, con la supervisión de la Comisión, negocian uno a uno 35 puntos con el Estado candidato.
Estos 35 puntos tratan temas como la libre circulación de mercancías, trabajadores y capitales; medios de comunicación; agricultura; alimentación; pesca; transporte; energía; tributos; política económica y monetaria.
También política social y empleo; industria; poder judicial y derechos fundamentales; libertad y seguridad; ciencia; educación; medio ambiente; unión aduanera; relaciones exteriores o seguridad y defensa.
Para avanzar en la negociación, los 27 Estados tienen que aprobar por unanimidad cada uno de estos 35 puntos. Todo el proceso lo supervisa la Comisión Europea.
Una vez se han cerrados todos los capítulos se redacta un tratado de adhesión, que también debe aprobarse por unanimidad en el Consejo de la Unión Europea y, a continuación, recibir la aprobación en el Parlamento Europeo.
Por último, todos los Estados miembro de la Unión Europea firmarán el tratado de adhesión del nuevo miembro y lo ratificarán de acuerdo con los procedimientos previstos en sus constituciones nacionales.