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Un soldado ucraniano espera armado entre la maleza, en la región del DonetskAFP

124 días de guerra en Ucrania

Así es el batallón «Chamán», el equipo de élite del Ejército de Ucrania

El músculo de la inteligencia ucraniana se considera «lo mejor» de su Ejército, y sus soldados son tan buenos que parecen «hechiceros»

Los sargentos 'Guapetón' y 'Veintidós' tienen 25 años de edad cada uno. Luchan contra las fuerzas del presidente ruso Vladimir Putin desde que empezó su guerra híbrida en Ucrania, en 2014.

Ambos soldados son muy inteligentes, y están en una forma física espectacular. Por eso, y por sus aptitudes en el campo de batalla, fueron seleccionados para formar parte de una unidad especial.

Se trata del décimo destacamento de las Fuerzas Especiales de Ucrania, músculo de la inteligencia militar ucraniana: llevan a cabo peligrosísimas misiones de asalto y reconocimiento.

¿Sus especialidades? El buceo, el paracaidismo, y el montañismo, por lo que solo aceptan entre sus filas a aquellos hombres que superan duras pruebas de resistencia y supervivencia. Popularmente, la gente los conoce como «el batallón Chamán», por que militarmente son tan buenos que parecen hechiceros.

Tras luchar junto a las tropas británicas y americanas en Afganistán, la unidad cosechó una reputación casi mítica, y son considerados lo mejor de las fuerzas especiales de Ucrania. «Los mandamos a las misiones más difíciles porque son los más hábiles y los más valientes. Son una parte muy importante de nuestra potencia en esta guerra», afirmó un oficial de la inteligencia ucraniana al periódico británico The Times.

Desde el inicio de la invasión el pasado 24 de febrero, el batallón Chamán ha estado involucrado en casi todas las batallas de Kiev, y siguió enfrentándose a las fuerzas de Rusia mientras avanzaban por la zona de Chernobil y la frontera con Bielorrusia.

Durante una entrevista con The Times, los soldados 'Guapetón' y 'Veintidós' explicaron qué, aunque estaban mejor preparados que otras unidades para el principio de la invasión, la crueldad de los ataques rusos los sorprendió.

«Nos avisaban todos los días de que la invasión podría empezar a la mañana siguiente. Cuando finalmente lo hizo, yo no podía creérmelo», explicó 'Guapetón'.

Desde el campo de batalla

Los soldados del batallón Chamán apenas tuvieron tiempo de asimilar lo que sucedía.

Entraron en el campo de batalla casi de inmediato, y se enfrentaron a las fuerzas de Rusia en el aeropuerto de Hostomel. Allí, soldados enemigos con paracaídas se lanzaban desde los helicópteros, como apoyo a sus columnas en tierra.

«Tomamos posiciones en los hangares. Luchábamos durante cuatro horas, antes de cambiar el turno a unidades de la guardia nacional», narró 'Guapetón'. Describió como «un caos» la primera hora de la batalla, ya que a las fuerzas de Ucranias les costó, en un principio, coordinarse.

Después, fueron desplegados al pueblo de Moshchun, con el objetivo de impedir que las fuerzas del Kremlin cruzasen el río Irpin. Tal avance habría otorgado a Putin un camino directo hasta Kiev.

Tres equipos se encargaron de evacuar a los civiles del lugar, y luego se adentraron en un tupido bosque a orillas del rio, para esperar la llegada de las tropas rusas.

Pero cuando los ataques empezaron a arreciar, y la lluvia de artillería se volvió demasiado pesada, corrieron a refugiarse en los edificios del pueblo. Como siempre, los rusos los superaban en número; sin embargo, el batallón Chamán y sus unidades de apoyo esperaron a que las tropas de Rusia llegasen al corazón del poblado.

Allí, lanzaron una brutal emboscada, que enfrentó a ambos bandos en una batalla peligrosamente cercana.

«Disparábamos desde cinco o diez metros de distancia. Intentábamos permanecer lúcidos, y arrancar los cinturones del enemigo, donde guardan sus municiones. Por supuesto, tenían mucha más artillería que nosotros, pero su moral estaba bajísima, y eran incapaces de luchar en combates de uno contra uno», explicó el soldado 'Veintidós' a The Times.