¿Qué es la 'Secta Moon' que obsesionaba al asesino de Shinzo Abe?
La reencarnación de Jesús, el 'tercer Adán', y bodas en masa con hasta 20.000 parejas, pero sin amor: algunas de las características de la religión que seguía la madre de Tetsuya Yamagami
El 8 de julio de 2022, tuvo lugar en las calles de Nara, Japón, la tragedia que conmocionó al mundo: el antiguo primer ministro nipón, Shinzo Abe, recibía un disparo en el cuello y otro, mortal, en el corazón. Falleció tras ser hospitalizado de urgencia.
Su asesino se llama Tetsuya Yamagami, tiene 41 años, y no mató de forma indiscriminada. Armado con una burda pistola hecha en casa, encañonó al líder japonés por venganza. Estaba convencido de que Abe guardaba vínculos con la secta ‘Moon’, una organización religiosa culpable, supuestamente, de arruinar a su madre a través de un exceso de donativos.
De nombre oficial ‘Asociación del Espíritu Santo para la Unificación del Cristianismo Mundial’, y conocida como ‘Iglesia de la Unificación’ o, simplemente, ‘secta Moon’, la organización que obsesionaba a Yamagami se fundó en 1954. Su creador fue un hombre proveniente de Corea del Norte, llamado Sun Myung Moon.
Moon nació en el seno de una humilde familia de granjeros. A los 15 años de edad, dijo haber tenido una visión: Jesús se le apareció con una solicitud, la de completar su misión en la tierra. Así, el joven norcoreano desarrolló su afán por conducir a la humanidad a un estado de «pureza sin pecado».
Su fe le causó problemas. Las iglesias protestantes lo rechazaron, y sus intentos de compartir el mensaje se torcieron cuando, en los años 40, el Gobierno comunista de Corea del Norte lo condenó a pasar cinco años en un campo de trabajos forzados, tras acusarlo de espionaje.
Pero Moon logró fundar su Iglesia, que pronto ganó popularidad entre Japón y las dos Coreas. En pocos años, la secta ganó alrededor de 10.000 fieles, y cuando Moon falleció en 2012, la ‘Iglesia de la Unificación’ sumaba más de tres millones de fanáticos.
El 'tercer Adán' y el matrimonio sagrado
Tres años después de fundar la secta, Moon escribió un libro que tituló «Exposición del Principio Divino». Es una reinterpretación de la Biblia, que sus fieles se apresuraron a adoptar como escritura sagrada.
La dudosa reinterpretación del fundador establecía que la intención original de Jesús era formar un ‘matrimonio perfecto’, para expiar a la humanidad de los pecados cometidos por Adán y Eva. De ahí la extraña obsesión con el matrimonio, que yace en el núcleo de la filosofía Moon. Jesús habría sido el segundo Adán, ejecutado antes de completar la misión, y por lo tanto, era necesaria la llegada de un tercero.
De acuerdo con Moon, este ‘tercer Adán’ sería la reencarnación de Cristo, el hombre perfecto que, junto a la mujer perfecta, formaría la pareja de «verdaderos padres espirituales de la raza humana». Los miembros de la Iglesia de la Unificación consideran que Moon y su segunda mujer, Hak Ja Han (con la que tuvo 14 hijos), son estos «verdaderos padres», y los fieles de la secta, sus «verdaderos hijos».
Esta obstinación por la institución del matrimonio es la razón por la cual la secta Moon acostumbra a celebrar sus bodas en masa.
La denominada ‘Ceremonia de la Bendición del Santo Matrimonio’ es un ritual sagrado en el que las parejas dejan de formar parte de la humanidad, pecadora, y se injertan en el linaje puro de Dios.
Algunas de las parejas que contraen matrimonio en estas ‘bodas’ grupales ya están casadas de antes. Otras ni se conocen, y forman parte de matrimonios concertados, ya que la ideología Moon rechaza la idea del amor romántico. La más grande estas ceremonias, en 2009, fue una boda masiva que incluyó a 20.000 parejas de todo el mundo.
Abe y la secta Moon
«Mi madre es seguidora de la Iglesia de la Unificación, y cayó en bancarrota tras donarles grandes sumas de dinero. Yo pensé que había que castigarlos, sin dudarlo», compartió Tetsuya Yamagami, durante la interrogación policial posterior al asesinato. Según citó el periódico japonés Yomiuri, el homicida quería acabar con «un alto cargo» de la organización, pero encontró que era demasiado difícil.
«Yo pensaba que Abe estaba vinculado con la secta, así que llevé a cabo el tiroteo», explicó Yamagami.
En realidad, no es extraño que algunas figuras del Gobierno se asocien temporalmente con organizaciones de esta índole. A lo largo de los años, varios líderes políticos han sido contratados por grupos como la Iglesia de la Unificación, para ofrecer discursos pagados. Abe habló en alguno de los eventos organizados por la secta Moon, y fue criticado por ello.
En cuanto a la madre del asesino Tetsuya Yamagami, arruinada a causa de su sectarismo, los vínculos están claros: un familiar suyo admitió, en declaraciones al periódico Asahi, que tras heredar la compañía constructora de su difunto marido, la mujer donó tanto dinero que ella y sus hijos quebraron.
Unos días después del asesinato, la Iglesia de la Unificación confirmó que, en efecto, la madre de Yamagami era miembro del grupo. Sin embargo, no compartió información alguna sobre sus actividades financieras.