Afganistán
Mueren 10 personas tras un ataque suicida en una mezquita de Kabul
La mayoría de este tipo de ataques han sido autoría del grupo yihadista Estado Islámico quienes mantienen una intensa rivalidad con los talibanes
Un nuevo ataque suicida provocó la muerte de 10 personas que realizaban la oración de la tarde en un mezquita de Kabul. Otras ocho personas habrían resultado heridas.
El ataque tuvo lugar en el área de Sar-e-Kotel de distrito policial 17, en el norte de Kabul, durante las oraciones de la tarde, alrededor de las 19.00 horas (14.30 GMT), indicó a Efe el oficial Malavi Mohammad Yasee.
«La explosión fue provocada por un terrorista suicida que se inmoló dentro de la mezquita durante las oraciones de la tarde, lo que provocó la muerte de 10 personas e hirió a 8 personas más», dijo Mohammad Yasee.
Otro funcionario talibán que no quiso mencionar su nombre aseguró a Efe de que entre «los muertos también se encontraba el conocido erudito religioso Malavi Amir Mohammad».
Podrían haber más víctimas
La ONG italiana Emergency, que cuenta con uno de los principales hospitales en Kabul, ha contabilizado incluso más víctimas de la explosión. "Hay 5 niños entre ellos, incluido uno de 7 años”, indicó.
Según un mensaje publicado en Twitter, al menos 27 personas fueron recibidas en los hospital de Emergency «tras una explosión en la zona del PD-17».
El principal portavoz del Gobierno de los talibanes, Zabihullah Mujahid, expresó en un comunicado la condena de su administración «a la explosión en una mezquita».
«Jannah al-Firdus a los muertos, la recuperación de los heridos y fortaleza a los familiares», deseó el portavoz, quien aseguró que «los asesinos y perpetradores de tales crímenes pronto serán capturados y castigados por sus actos atroces».
Ningún grupo armado ha reclamado la autoría del ataque hasta el momento
Pese al fin de la guerra tras la retirada de las tropas internacionales y la victoria de los talibanes, Afganistán ha sufrido varios de sus más sangrientos ataques desde que los islamistas ascendieron al poder hace un año.
La mayoría de estos ataques han sido autoría del grupo yihadista Estado Islámico, que se ha convertido en la principal amenaza para la seguridad en Afganistán y mantiene una intensa rivalidad con los talibanes.