Elecciones en Italia
Meloni no se esconde y libra la batalla cultural en defensa de las familias y los valores cristianos
Girogia Meloni ha hecho de la defensa de la familia y de los valores cristianos de la sociedad italiana su gran baza de cara a las elecciones generales del próximo 25 de septiembre.
La candidata de Fratelli d’Italia (FdI), que encabeza todas las encuestas, no se esconde a la hora de defender sus principios y lo demostró la semana pasada cuando se enfrentó en un tenso cara a cara televisado en el sitio web del Corriere della Sera con su rival del Partido Democrático (socialdemócratas), Enrico Letta.
Meloni inisitió en las tres columnas que, según afirma, sostienen la sociedad italiana: Dios, patria y familia. Señaló que se trata de «un lema mazziniano (en referencia a Giuseppe Mazzini, uno de los padres de la nación italiana) que no choca con la actualidad».
La familia es el núcleo fundacional de nuestra sociedadCandidata a la presidencia del consejo de ministros de Italia
Ese lema, resaltó, es «una forma de reivindicar nuestra propia identidad, la identidad de nuestra sociedad, la identidad europea, respetando a los demás».
«Significa que la familia es el núcleo fundacional de nuestra sociedad, el principal amortiguador social que tenemos; significa que la patria es la identidad que nos une (…); y también la identidad religiosa es fundamental independientemente de que se crea en el valor de la laicidad del Estado», defendió.
«No se trata de imponer a nadie aquello en lo que se cree. Se trata de recordar que en los valores cristianos se sintetiza nuestra civilización. Nosotros creemos en la solidaridad porque nos lo ha enseñado el cristianismo, en la laicidad del Estado porque nos lo ha enseñado el cristianismo, en el respeto porque nos lo ha enseñado el cristianismo…», afirmó.
Asimismo, defendió que «no creo que debamos esconder esta identidad para expresar respeto por los demás, como defiende la izquierda. La paradoja de quitar los crucifijos de las aulas de nuestras escuelas, y luego aceptar que en Europa haya barrios enteros en manos de la sharia islámica, yo, sinceramente, no la entiendo».
Defensa de las familias y los menores
Consciente de la fuerza de dar la cara en la batalla cultural en un país que en los últimos años experimenta un resurgir de los valores tradicionales, Meloni hace bandera de los derechos de la familia.
Además de proponer importantes ayudas directas y exenciones fiscales a las familias, se mostró en desacuerdo, sin tapujos, con el derecho a la adopción de menores por parte de las parejas homosexuales, propuesto por todos los partidos de izquierda.
«No porque, como se dice de forma banal, yo sea homófoba, sino porque pienso que, a los niños, que ya han sufrido infortunios, hay que garantizarles lo mejor, y lo mejor, desde mi punto de vista, y lo digo porque yo misma he vivido unas condiciones familiares que me hacen ver este asunto desde un punto de vista humano –Meloni creció en una familia monoparental–, es tener un padre y una madre», argumentó.
Giorgia Meloni amplió su punto de vista sobre la demanda del derecho de adopción por parte de parejas homosexuales en un intercambio de argumentos con un joven activista LGBT que intentó boicotear uno de sus mítines.
El joven activista replicó a la candidata de FdI que «los cambios son inevitables y en Italia, en el futuro, me podré casar y adoptar».
Meloni le contestó que, con la actual ley, que su partido no pretende cambiar, los homosexuales ya pueden casarse civilmente.
Sobre la posibilidad de adoptar, la candidata conservadora reiteró que «un niño tiene derecho a crecer con un padre y una madre».