Manifestación en el Kurdistán iraquí por la muerte de Masha Amini
Irán
Las costuras étnicas de Irán se resquebrajan en medio de la ira por la muerte de Mahsa Amini
El frágil equilibrio entre las diferentes etnias que conforman Irán empieza a romperse en medio de las manifestaciones contra el régimen de los ayatolás por la muerte de Mahsa Amini.
Amini, joven kurda de 22 años, murió el pasado 16 de septiembre después de que la Policía de la moral de Teherán la detuviera por llevar mal puesto el velo cuando se encontraba de visita en la capital.
Por ello, no es de extrañar que la ruptura del tejido étnico iraní se produzca, precisamente, por su costura más frágil: la del Kurdistán iraní.
El gobierno de la República teocrática defiende que las protestas están patrocinadas por Occidente e impulsadas por los grupos kurdo-iraníes exiliados en el Kurdistán iraquí.
Por ese motivo, el miércoles 28 de septiembre, fuerzas iraníes de la Guardia Revolucionaria bombardearon posiciones de los peshmergas kurdo-iraquíes,
Como resultado del ataque, murieron catorce personas y 59 resultaron heridas. El ataque contra los kurdos iraquíes es sólo uno de los síntomas del derrumbamiento del equilibrio étnico.
Minorías discriminadas
Las protestas se han extendido por todo el país y son especialmente fuertes en aquellas regiones de minorías étnicas tradicionalmente discriminadas por Teherán.
La muerte de Amini ha exacerbado los resentimientos latentes entre las minorías étnicas, especialmente los kurdos, y ha cristalizado en un movimiento anti régimen.
Mientras tanto, las autoridades kurdas tratan de poner fin a las protestas alternando la represión violenta de los manifestantes con llamamientos de sectores religiosos a realizar concesiones e investigar la muerte de Amini.
Según señala el Institute for the Study of War, algunos funcionarios de la línea más dura del régimen han expresado su solidaridad con la familia de Amini y han pedido al gobierno iraní que investigue las circunstancias en que se produjo el fallecimiento de la joven kurda.
En ese sentido, el ayatolá Hossein Nouri Hamedani, una de las figuras religiosas de referencia del chiísmo persa, pidió en un comunicado que las autoridades iraníes aborden las demandas de los manifestantes.