«¡Nos vamos a la tierra de la libertad!»: un cubano graba su huida de la dictadura por mar hasta EE.UU.
Un grupo de balseros cubanos grabó y difundió en redes sociales el trayecto que siguieron en su precaria embarcación desde Cuba hasta las playas de Cayos Marquesas, en Florida.
Durante el trayecto, los 20 cubanos que navegaban a bordo de la barca, dotada con un motor de automóvil, se cruzaron con otra embarcación igual de frágil e igual de masificada antes de llegar a su destino.
Los balseros muestran en el vídeo su alegría por dejar atrás la dictadura cubana y dirigirse a un nuevo futuro, incierto, pero que afrontan con optimismo: «¡Ahí nos vamos, cojones, para la tierra de la libertad!». «¡Triunfadores es lo que somos!».
En declaraciones al portal Cubanos por el Mundo, el cabeza del grupo, Loisel De León Morales, de 26 años, explicó que salieron de Bahía Onda, en al provincia de Artemisa, el 17 de octubre, y llegaron a Cayos Marquesas el 18.
Antes permanecieron 27 días ocultos para que las autoridades cubanas no abortaran la salida de la embarcación.
«El cubano no tiene derecho a nada en ese país. Ahora mismo pusieron un Código de la Familia aprobado cuando la mayoría de cubanos votó que ‘no’ y todos sabemos que fue aprobado por ellos mismos. No hay democracia», explica en la entrevista sobre los motivos que le motivaron a huir.
«Otra cosa que te motiva a salir es la alimentación. La alimentación es muy difícil en ese país. Comerte un huevo hoy por hoy es un lujo. Algo que es tan simple que puede tener cualquier persona en el mundo, en Cuba es un lujo», añadió. «Mi pueblo no avanza, las calles se están destruyendo».
«La solución a nuestros problemas era salir de Cuba, porque los apagones nos tienen locos, los mosquitos picándote y no puedes dormir, el dengue te coje porque no tienes ni ventilador para poder dormir ni nada. Necesitas un medicamento y se lo tienes que comprar a particulares porque el gobierno no tiene ni con qué venderte medicamentos», señaló.
Según el portal cubano de noticias, Cubanet, la patrulla fronteriza de Estados Unidos auxilió a un total de 80 balseros el 19 de octubre tanto en los Cayo Marquesas como en Cayo Hueso.
En total, llegaron a los Cayos de Florida 4 embarcaciones improvisadas procedentes de las costas cubanas.
Según señala Cubanet, todas las semanas llegan a las costas de Florida decenas de cubanos. La mayoría de ellos, sin embargo, no logran alcanzar su «sueño americano» y la guardia costera los deporta a la isla. Otros corren peor suerte, naufragan y mueren ahogados en el mar.
El portal cubano de noticias detalla un caso concreto: una familia cubana de 20 miembros llegó a Florida tras 10 horas y media de viaje por mar desde La Habana.
«Llegamos todos bien a Estados Unidos vinimos en una lancha rápida 20 familiares desde Cuba Cojimar con mucho trabajo y sacrificios. Sueño Cumplido. Ya estamos en casa de la familia», señaló uno de los miembros del grupo en una publicación en Facebook.
En este caso, todos los miembros de la familia, entre la que había varios niños, fueron aceptados en Estados Unidos debido al riesgo de represión política que correrían si fueran deportados a Cuba.
Cuba está experimentando un repunte de balseros que tratan de huir de la isla a Estados Unidos debido a la grave crisis social que atraviesa el país.
En los últimos meses, la isla está sufriendo continuos cortes de electricidad debido a una conjunción de factores, agravada por los efectos del huracán Ian hace tres semanas.
La mayoría de los apagones señala EFE, se deben a roturas y fallos en las anticuadas plantas termoeléctricas, falta de combustible y ausencia de mantenimiento.
A pesar de la fuerte represión por parte del gobierno, Cuba ha registrado desde el mes de julio numerosas protestas en todo el país sin que, de momento, hayan supuesto un motivo de preocupación para la dictadura castrista.
Antes que salir a la calle a protestas y arriesgarse a acabar en alguna oscura cárcel del régimen comunista, los cubanos prefieren arriesgar su vida y lanzarse al Estrecho de Florida con la vaga esperanza de comenzar una vida nueva en Estados Unidos.