La maternidad de Vilniansky, en la región de Zaporiyia, destruida por las bombas
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Las bombas rusas matan a un recién nacido ucraniano en un ataque contra una maternidad de Zaporiyia
Rusia bombardeo durante la noche del martes al miércoles una maternidad de una pequeña ciudad de la región de Zaporiyia y causó la muerte de un recién nacido.
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Según denunció el gobernador de la región, Oleksandr Starukh, el objetivo del ataque con «grandes cohetes» era el hospital materno de la localidad de Vilniansky. «El dolor vuelve a adueñarse de nuestros corazones», publicó el gobernador en su canal de Telegram.
Los equipos de emergencia pudieron rescatar a la madre del pequeño de entre los escombros del edificio de la maternidad, junto con el médico que atendió el parto.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, condenó el ataque que definió de «terrorista». «El enemigo ha decidido una vez más tratar de lograr mediante el terror y el asesinato lo que no pudo lograr durante nueve meses. No tendrá éxito. En cambio, tendrá que rendir cuentas por todo el mal causado a nuestro país», afirmó.
El recién nacido no ha sido el único fallecido esta noche por las bombas rusas. En la región de Jarkov dos personas murieron como consecuencia de un bombardeo ruso, según confirmó Kyrylo Tymoshenko, subdirector de la oficina del presidente.
Estos nuevos ataques confirman que Rusia ha fijado la infraestructura civil -plantas de energía, hospitales, escuelas y edificios residenciales- como objetivo militar prioritario para tratar de doblegar la voluntad de resistencia de la población ucraniana ante los fracasos de las tropas rusas en el campo de batalla.