El ministro de Justicia de Brasil, Flávio DinO (i), junto al director general de la Policía Federal, Andrei Rodrigues
Brasil
El nuevo jefe de la Policía Federal de Brasil promete mano dura con los agentes cómplices de los asaltos
Andrei Rodrigues asumió el cargo este martes y advirtió que actuará «con firmeza» para castigar a los que ayudaron en los ataques perpetrados a las sedes de los tres poderes en Brasilia
El nuevo director de la Policía Federal (PF) de Brasil, Andrei Rodrigues, quien asumió el cargo este martes, aseguró que «no tolerará» actos contra la democracia y que actuará «con firmeza» en el castigo a los ataques perpetrados a las sedes de los tres poderes el domingo.
Rodrigues, que estará a cargo de la principal fuerza policial con jurisdicción nacional de Brasil, fue el jefe del equipo de seguridad del Luiz Inácio Lula da Silva durante la campaña presidencial que llevó al líder progresista por tercera vez al poder en Brasil.
El alto funcionario asumió el mando de una de las instituciones más importantes para la seguridad del gigante sudamericano dos días después de que bolsonaristas radicales que no aceptan los resultados de las elecciones presidenciales asaltarán las sedes de las principales instituciones en Brasilia.
Para Rodrigues, los actos ocurridos el domingo son el resultado de «palabras de odio» que se convirtieron en «acciones tangibles» que pusieron en riesgo el Estado democrático de derecho.
En su discurso, el alto funcionario también señalo que no se admitirán «injerencias» que intenten orientar las acciones de la entidad y dijo que uno de sus grandes desafíos será el combate a las noticias falsas.
«Esa problemática en particular, la difusión de mentiras falsas en el mundo digital, es especialmente retadora para nosotros. No solo porque entra dentro del rango de atribuciones legales de la Policía Federal sino porque ha demostrado su efectiva nocividad en hechos recientes», señaló.
Rodrigues ingresó en 2002 en la Policía Federal y es recordado por haber comandado la seguridad durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016 y de la Copa del Mundo en 2014.
El alto funcionario estuvo al frente de las comisarías de los estados de Amazonas y Río Grande do Sul y fue jefe de seguridad de la campaña presidencial de Dilma Rousseff en 2010.
