Corrupción en la UE
El Qatargate, al descubierto: el líder de la trama lo destapa todo
El exeurodiputado socialista Antonio Panzeri, considerado el 'cerebro' del caso de corrupción que ha salpicado a la Unión Europea, confiesa haber usado una ONG para que el dinero circulara
El caso de corrupción, bautizado con el nombre del Qatargate, ha salpicado de pleno el corazón de la Unión Europea. El escándalo ha sido de tal calibre, que entre los imputados se encuentra una de las vicepresidentas del Parlamento Europeo, Eva Kaili, además de varios miembros de su familia.
Pero no solo, y es que otro de los implicados de la trama, es el exeurodiputado socialista Antonio Panzeri, considerado el 'cerebro' del Qatargate, y que ha accedido a destapar la trama, tras firmar un acuerdo con la Fiscalía belga en el que acepta cinco años de prisión, de los cuales uno debe ser efectivo, además de una multa de 80.000 euros, más un millón de euros en concepto de decomiso.
Las declaraciones del eurodiputado han provocado un vuelco en la trama, ya que ha cargado contra el eurodiputado socialista Marc Tarabella y exonerado a la belga Marie Arena. El caso se presenta complejo, ya que a medida que se indaga aparecen más implicados.
El escandalo salió a la luz el pasado mes de diciembre, durante la celebración del Mundial de Qatar. Los medios belgas publicaron que varios eurodiputados habrían cobrado y recibido regalos a cambio de suavizar su postura en torno al reino del Golfo.
La griega Eva Kaili, vicepresidenta del Parlamento Europeo, fue la primera en ser señalada y acusada de haber sido comprada por Qatar. La eurodiputada griega, miembro del Grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas en Europa, fue destituida de su cargo y arrestada por su vinculación con la trama de corrupción.
Pero no solo ella, sino que también su pareja, Francesco Giorgi, asistente de Kaili, y el padre de esta también estarían relacionados con el caso. La Policía belga pilló al padre de la eurodiputada con maletas llenas de dinero en efectivo. Posteriormente, la socialista confesó que pidió a su padre que escondiera los billetes.
La trama va mucho más allá, e implica a más eurodiputados. Andrea Cozzolino, eurodiputado socialista por Italia y actual presidente de la Delegación para las Relaciones con el Magreb; Luca Visentini, secretario general de la Confederación Europea de Sindicatos; Niccolò Figa-Talamanca, lobista y presidente de la asociación «No Hay Paz Sin Justicia», Marc Tarabella, miembro del grupo de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas; y la belga Marie Arena, eurodiputada socialista que encabeza la subcomisión de derechos humanos.
Sin embargo, con el testimonio de Antonio Panzeri, el Qatargate da un vuelco y exculpa a la belga Marie Arena, a quien describe como una persona «extremadamente recta y que no debería haber sido acusada en un caso como este». Por su parte, señala directamente a Marc Tarabella.
Panzeri reconoció, según informa el diario belga L'Echo, que pagó entre 120.000 y 140.000 euros en varios plazos al eurodiputado socialista. Este testimonio supone que Panzeri sería juzgado bajo la ley pentiti, del italiano «arrepentido», convirtiéndose en el segundo de la justicia belga, tras el exagente de jugadores serbio Dejan Veljkovic.
Se trata de un sistema pensado, especialmente, para luchar contra la mafia italiana, existente en Bélgica desde 2018. Panzeri era el centro de la red de corrupción y usaba una ONG, que él mismo creó cuando abandonó la Unión Europea, para que el dinero circulara y llegara a los diferentes implicados en la trama del Qatargate.