Las potentes armas de la guerra: del arsenal soviético a la moderna tecnología de la OTAN
A lo largo de un año de guerra, el territorio ucraniano ha visto llegar y morir diferentes tipos de armas, bien de nuevo diseño como las entregadas por la OTAN, como las renovadas por Rusia de su arsenal heredado de la Unión Soviética.
En este especial de la guerra, presentamos una selección de las armas clave que han definido el devenir de la invasión rusa de Ucrania y que muestran estilos de combate y tácticas de guerra tradicionales y modernas en un mismo escenario.
La madrugada del 24 de febrero de 2022, el ejército ruso, el hasta entonces segundo más poderoso del mundo, invadió Ucrania. Largas columnas de tanques cruzaron la frontera ucraniana como parte de una ofensiva terrestre en la que destacaron los BMPT «Terminator» y los modernizados T-90M, así como el mortífero lanzacohetes TOS-1 Buratino.
Los aliados de la OTAN condenaron la invasión rusa de Ucrania y al mismo tiempo movilizaron armamento para que el Gobierno de Kiev pudiera repeler la invasión.
Ante la abrumadora superioridad numérica de Rusia, los lanzamisiles antitanques portátiles resultaron especialmente útiles y efectivos para detener el avance de los tanques rusos.
En una segunda fase de la invasión o en un cambio de estrategia ante las dificultades para avanzar en el fangoso terreno ucraniano, Rusia hizo uso de sus misiles de crucero y exhibió sus modernos misiles hipersónicos Kinzhal lanzándolos desde barcos en los mares Negro y Caspio causando terror y graves daños en Ucrania.
El ejército ucraniano neutralizó de manera muy efectiva los bombardeos desde el mar Negro y provocó estragos en la poderosa flota rusa gracias a los misiles de fabricación nacional Neptune y los misiles antibuque Brimstone proporcionados por Reino Unido.
La exitosa ofensiva ucraniana comenzó con el hundimiento del Orsk, un buque que movilizaba tanques y blindados para la invasión, posteriormente hundió el Moskva, el buque insignia de la flota rusa, y logró destruir 5 de las 8 patrulleras ‘Raptor’ de rusia obligando a la flota rusa a retirarse de la costa hacia el interior del mar Negro.
La invasión rusa de Ucrania alcanzó niveles de crudeza y crueldad previstas y prohibidos en el Derecho Internacional. Kiev denunció que Moscú utilizó en su ofensiva las letales bombas 'flechette' como un arma de alcance indiscriminado que afectaría a civiles.
Así mismo, se denunció el uso de bombas de fósforo blanco también proscritas a nivel internacional.
Desde las primeras 24 horas de la invasión la fuerza aérea ucraniana quedó fuertemente golpeada, sin embargo, Rusia nunca logró la plena superioridad aérea en los cielos de Ucrania, entre otras cosas, por temor a los lanzacohetes portátiles proporcionados por occidente y especialmente por el misil supersónico portátil Starstreak que literalmente aterrorizó a los pilotos rusos.
En un intento de contener los incesantes bombardeos rusos sobre territorio ucraniano, los aliados de la OTAN, proporcionaron a mediados de 2022 sistemas de misiles de medio alcance como los famosos HIMARS, lanzadores múltiples de largo alcance como el M270 MLRS y los sofisticados sistema de misiles de defensa antiaérea como el NASAMS.
Junto a los sistemas de misiles antiaéreos, la entrada en escena de equipos de artillería como los obuses estadounidenses M777 de 155 mm y los cañones suecos Archer, permitieron a los ucranianos lanzar una contraofensiva a finales de verano que les permitió recuperar en otoño importantes territorios ocupados por Rusia en el Donbás.
Los drones o aeronaves no tripuladas han tenido un especial protagonismo en la guerra de Ucrania convirtiéndose en una pesadilla para ambos ejércitos.
Primero fueron los ucranianos los que recurrieron a los drones kamikazes Switchblade de origen estadounidense, seguidos de los Bayraktar de fabricación turca.
Rusia, por su lado, contratacó con los drones iraníes Shahed-136 y Arash-2 causando estragos en la población civil ucraniana e involucrando al régimen de Teherán que, hasta entonces, jugaba a la ‘neutralidad’.
El ejército ruso intentó recuperar la iniciativa introduciendo sus últimas innovaciones tecnológicas disponibles como los misiles teledirigidos Product-305 que pueden ser disparados desde helicópteros.
Si bien, en los últimos meses de la guerra, los bombardeos rusos han disminuido su intensidad y frecuencia, el Gobierno de Kiev quiere tener la capacidad de detenerlos cuando el Kremlin decida o pueda reanudarlos.
Zelenski no ha escondido su deseo de una ‘cúpula de hierro’ como la de Israel, por lo que la próxima llegada de la batería de misiles antiaéreos ‘Patriot’ es un primer paso en esa dirección.
Para Ucrania no sólo era urgente recuperar el territorio ocupado por Rusia, sino mantener las plazas ya reconquistadas, por esa razón Kiev ha insistido en solicitar a Occidente carros de combates para el transporte de soldados.
Australia proporcionó los blindados Bushmaster y los aliados de la OTAN están entregando los Leopard de fabricación alemana.
Está por verse la versión de tanque Abrams que finalmente entregará Estados Unidos a Ucrania.
Especial realizado por:
Redacción: Edgardo Pinell. Diseño: David Díaz. Infografía: Kindelán.