Charles de Courson, figura de peso de Liot y el peor adversario para Macron, en una de las dos mociones de censura, responde preguntas de los periodistas en la Asamblea Nacional
Moción de censura a Macron
Liot, el pequeño grupo parlamentario que intenta derrocar hoy al Gobierno francés
Según los recuentos más fiables, anoche faltaban 26 diputados para alcanzar la fatídica cifra de 287 que permitiría derrocar al Gobierno francés, presidido por Élisabeth Borne, a cuenta de la reforma de las pensiones. Esos 26 votos tendrían que venir, sí o sí, de las filas de Los Republicanos (LR), la formación de centroderecha cuya actitud ambigua durante los debates sobre la reforma de las pensiones han obligado a la primera ministra a comprometer su responsabilidad ante la Asamblea Nacional, lo que ha dado pie a la presentación de dos mociones de censura.
Una está impulsada por la Agrupación Nacional, liderada por Marine Le Pen. Sin embargo, es la otra, la que más preocupa en el Elíseo y en Matignon, sede del Gobierno. La presenta Liot, acrónimo de Libertés, Indépendants, Outre-Mer [Ultramar] et Territoires, un pequeño grupo parlamentario de apenas una veintena de diputados procedentes, como su nombre lo indica, de horizontes ideológicos muy diversos y a menudo incompatibles entre sí, aunque siempre dentro de los límites de la moderación política.
Sin ir más lejos, la izquierda radical agrupada en torno a la Nupes jamás votará la moción de los lepenistas. Por su parte, los indecisos de LR tampoco se unirían a una moción de censura cuyo texto llevase la huella de la Nupes.
De ahí que desde el jueves -día en que Borne anunció la aplicación del artículo 49.3 de la Constitución-, los diputados de Liot estén desplegando una actividad frenética tanto para conseguir los votos necesarios- sería toda una hazaña- como, y sobre todo, para redactar un texto que congregue a Nupes, Agrupación Nacional -ha anunciado que votará esa moción de censura, aunque no sea la suya- y una buena porción de LR.
Los sacrificios
La elaboración de esta coalición negativa exige algunos sacrificios, como la exclusión del joven diputado Louis Boyard, exponente del sector más extremista de la Nupes, de los firmantes del texto en el que se apoyará la moción. También implica una importante labor de persuasión -y el tiempo apremia- en dirección del centro derecha.
Charles De Courson, decano de la Asamblea Nacional -ostenta un escaño de forma ininterrumpida desde 1993- es, probablemente, el parlamentario más brillante de Francia
El principal encargado de la tarea es Charles De Courson, decano de la Asamblea Nacional -ostenta un escaño de forma ininterrumpida desde 1993- y, probablemente el parlamentario más brillante de Francia. De Courson lleva ya un tiempo refugiado en Liot tras una larga carrera en el centro derecha, del que salió dando un portazo, harto de sus luchas intestinas.
Hombre de ideas y de trabajo de fondo más que de intrigas, está dotado de una poderosa oratoria y ha puesto en un brete a distintos gobiernos, independientemente de su signo político. Ahora, tras treinta años en el Palais Bourbon, tiene la posibilidad de derrocar a uno. Será complicado.
