Soldados ucranianos en Bajmut a bordo de un BMP de infantería
392 días de guerra en Ucrania
El retraso en el envío del armamento occidental arroja dudas sobre la contraofensiva ucraniana
El armamento prometido a Ucrania por sus socios occidentales incluye carros de combate Leopard, Challenger, Abrams, baterías Patriot, sistemas de artillería de largo alcance, cazas y municiones básicas.
392 días de guerra en Ucrania
Tras fracasar en Bajmut, Rusia podría tratar de frustrar la contraofensiva ucraniana con un nuevo asedio
Un paquete con vocación de proporcionar a las fuerzas ucranianas el poder necesario para expulsar a Rusia de su territorio.
Ucrania cuenta con ese material para emprender una exitosa contraofensiva esta misma primavera. Sin embargo, los retrasos en la llegada del material bélico amenazan por echar por tierra los planes de Kiev.
El tiempo juega en favor de Rusia, inmersa en este momento en una pausa operativa tras meses de esfuerzo bélico en el frente de Bajmut.
Si Ucrania no consigue acumular la fuerza suficiente para ejecutar sus planes de contraofensiva, dejará pasar la oportunidad y dará tiempo a Rusia para preparar su próxima acometida.
Los retrasos, además, no sólo afectan a los carros de combate y sistemas de largo alcance. Lo que más preocupa al alto mando ucraniano son los retrasos en la entrega de munición de artillería, convertida ahora en la máxima prioridad para Kiev.
«Cuanto antes recibamos más proyectiles, más vidas ucranianas se salvarán», declaró el ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba.
Las tropas ucranianas se encuentran en un momento de escasez tanto de municiones como de tropas de calidad.
Tropas ucranianas se encuentran desde hace meses entrenándose en los países de la OTAN en el manejo de los nuevos sistemas.
Los sistemas occidentales son muy diferentes y más complejos que los sistemas de origen soviético, más fáciles de mantener y reparar, a los que están habituados los soldados ucranianos.
Por el momento, Kiev mantiene sus planes con un objetivo: lanzar una gran ofensiva en Zaporiyia hacia el sur en dirección Melitopol-Mariúpol que corte el corredor terrestre que une Crimea con Rusia.
La defensa de Bajmut en los últimos meses agotó las capacidades ucranianas. Si quieren recuperar su capacidad ofensiva, deberán recibir el armamento prometido a un ritmo frenético en las próximas semanas. Un reto logístico que no está claro que se pueda ejecutar con éxito.
