Los franceses temen que el país se empantane en la violencia por la reforma de las pensiones

Las protestas masivas registradas en toda Francia desde hace meses para tratar de echar abajo la reforma de las pensiones impulsada por el gobierno de Emmanuel Macron, y su subida de la edad de jubilación de los 62 a los 64 años, han hundido a la población gala en el pesimismo.

Según una reciente encuesta realizada por la empresa demoscópica Fiducial-Odoxa para Le Figaro entre 1005 personas, cerca del 90 % de los franceses piensa que la violencia social se enquistará en Francia.

Según el resultado del estudio demoscópico, una mayoría de franceses creen que el país se empantanará en las imágenes de enfrentamientos entre manifestantes y policías, saqueos de comercios y barricadas en llamas.

La encuesta revela otra información relevante: a pesar del casi unánime rechazo a la reforma de las pensiones, el 59 % condena la violencia y los disturbios protagonizados por grupos antisistema durante las protestas por la subida de la edad de jubilación.

Asimismo, un 57 % de los franceses cree que existe un alto riesgo de insurrección en el país, y que en Francia se podrían producir escenas como las del asalto al Capitolio por partidarios de Donald Trump en Estados Unidos.

La encuesta también arroja un descenso de la confianza de la población en las fuerzas de seguridad para garantizar el orden y la ley en el país, y aumenta el porcentaje, hasta el 77 %, de quienes quieren que se recurra a grupos de seguridad privados.

Además, el descrédito en el gobierno de Macron y su primera ministra Elisabeth Borne, es notable.

El 62 % de los encuestados piensa que el gobierno no ha estado a la altura en la crisis y que no ha sabido mantener el orden ni ha podido proteger a la población francesa durante el estallido de violencia.