Italia
Un ministro de Meloni, blanco de las críticas, por decir que no se puede ceder «ante la sustitución étnica»
La oposición ha utilizado las declaraciones de Francesco Lollobrigida para ir en contra del Gobierno italiano
Italia, que atraviesa una crisis de natalidad sin precedentes, no puede «ceder a la idea de la sustitución étnica» para mantener su sistema económico y social, declaró el ministro de Agricultura y Soberanía Alimentaria, Francesco Lollobrigida. Unas declaraciones que fueron utilizadas inmediatamente por la oposición para arremeter contra el Gobierno de Meloni.
Hay que «construir un bienestar que permita a la gente trabajar y tener una familia, apoyar a las parejas jóvenes para que encuentren empleo. No podemos ceder a la idea de la sustitución étnica, los italianos tienen menos hijos así que los sustituimos por otros, ese no es el camino», señaló Lollobrigida.
Aunque posteriormente explicó que consideraba la inmigración «un hecho fisiológico natural» y recordaba que él mismo era «nieto de un emigrante», sus palabras han generado una enorme polémica, en particular entre la oposición que lidera Elly Schlein, al frente del Partido Demócrata (PD).
«Sus palabras son repugnantes e inaceptables por parte de alguien en su cargo. Nos retrotraen a los años 30, son palabras que tienen el sabor del supremacismo blanco», declaró Schlein.
La natalidad en Italia bajó por primera vez de los 400.000 nacimientos anuales y en 2022 registró 393.000 neonatos, la cifra más baja desde la unificación del país en 1871, según el Instituto Nacional de Estadística (ISTAT).
Entre los principales motivos del descenso histórico de la natalidad en Italia se encuentra el progresivo envejecimiento generalizado de los habitantes país, que también afecta a la población femenina, reduciendo el número de mujeres en «edad reproductiva» (entre los 15 y los 49 años).
Esta mañana, Meloni ha asegurado que en Italia «hay cada vez más gente a la que mantener y cada vez menos gente que trabaja» y «durante demasiados años no se ha invertido en natalidad».
«La forma en la que trabaja el Gobierno no es solo la de los inmigrantes, sino también la de la gran reserva no utilizada que es la mano de obra femenina. Hay que equipararla a la media europea y centrarse en la demografía, con incentivos por parte de las familias para traer hijos al mundo», destacó.
El Senado italiano debate esta semana el decreto que el Gobierno de Meloni aprobó el 9 de marzo tras el naufragio de una barcaza frente a las costas de Calabria (sur) en el que murieron 93 inmigrantes y que, entre otras cosas, aumentará las penas de cárcel para los miembros de las mafias que gestionan el tráfico migratorio irregular a través del Mediterráneo.
Además, el Ejecutivo decretó el pasado martes el estado de emergencia nacional migratorio durante los próximos seis meses en un intento de potenciar las deportaciones mediante un aumento de los centros para identificar y repatriar a los inmigrantes que no tengan derecho al asilo.