Un repentino problema de salud obliga a Erdogan a cancelar su agenda en plena campaña electoral

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, interrumpió este miércoles su agenda pública después de sufrir el día anterior una repentina indisposición en directo durante una entrevista emitida de forma simultánea en dos televisiones turcas.

Erdogan, que se encuentra en plena campaña electoral para las elecciones presidenciales del 14 de mayo, afirmó que retomará su agenda el jueves.

«Hoy descansaré en casa de acuerdo con el consejo de nuestros médicos», anunció Erdogan en su cuenta de Twitter.

«Si Dios quiere, continuaremos nuestro programa a partir de mañana», añadió el mandatario de 69 años tras disculparse por no poder participar en los actos en tres provincias de Anatolia central donde tenía previsto hablar este día, en medio de la campaña electoral para las elecciones generales del 14 de mayo.

Por su parte, el portavoz de Presidencia, Ibrahim Kalin, aseguró poco después, también en un tuit, que la salud del jefe de Estado y Gobierno «es buena».

Su inesperado anuncio se produjo después de que a última hora del martes y a raíz de un problema de salud aparentemente también imprevisto, el presidente interrumpiera brevemente una entrevista emitida en directo por dos canales de televisión.

Antes del breve corte de la emisión, los espectadores oyeron cómo personas que estaban en el entorno del mandatario exclamaban «¡Oh, no!».

El principal rival de Erdogan en los comicios, el socialdemócrata Kemal Kiliçdaroglu, publicó enseguida un tuit en el que le deseaba una pronta recuperación.

Tras volver a la emisión minutos después, el presidente explicó que había sufrido un problema estomacal debido a un resfriado.

«Naturalmente, nos enfrentamos a este tipo de problemas de vez en cuando en medio de una agenda tan apretada», declaró entonces.

Hoy expresó su agradecimiento a aquellos que le habían transmitido «sus deseos y oraciones por el pequeño inconveniente que tuve durante la emisión debido a mi ajetreado trabajo».

Erdogan, que gobierna Turquía desde 2002 como líder del conservador e islamista partido AKP, se enfrenta estos días a su carrera electoral más dura, ya que la mayoría de los sondeos le pronostican una derrota frente a Kiliçdaroglu, candidato único de una alianza de seis partidos opositores.

Kiliçdaroglu lidera los sondeos con un 47,5 % de la intención del voto, una ventaja de más de tres puntos frente al 44,4 % de Erdogan.

Si ninguno de ellos supera el 50 % el 14 de mayo, los electores deberán volver a las urnas dos semanas más tarde para elegir en una segunda vuelta a su presidente.