Azerbaiyán ve peligrar el apoyo de Turquía en el conflicto con Armenia por el Nagorno Karabaj

Turquía se enfrenta a unas elecciones presidenciales en menos de un mes, unos comicios que se han convertido en un referéndum en torno a la figura de Recep Tayyip Erdogan. Los resultados del próximo 14 de mayo pueden suponer la caída del actual presidente turco o, de lo contario, su reafirmación en el cargo. Son muchos los ojos puestos en las elecciones turcas. Azerbaiyán es uno de los países que aguarda con cautela los resultados.

Bakú teme que, si la oposición consigue imponerse a Erdogan, la política exterior turca se reconfigure y eso afecte al país asiático. Azerbaiyán mantiene un conflicto abierto con Armenia por la región de Nagorno Karabaj. Este enclave en disputa, de facto, pertenece a Azerbaiyán, que mantiene la región bajo bloqueo desde el pasado mes de diciembre, para presionar a la parte armenia, que lo reclama como suyo.

Turquía, con Erdogan al frente, se ha perfilado como un aliado fiable para Bakú en el enfrentamiento que mantiene con Ereván. Por ello, desde Azerbaiyán se inclinan hacia una victoria electoral del actual mandatario turco. La situación en Nagorno Karabaj es imprevisible, se revuelve entre la paz y la guerra, por ello el mantener alianzas estables es vital para Azerbaiyán, que ve con desconfianza a la oposición turca.

La «Mesa de los Seis», como se conoce al conglomerado de partidos que componen la oposición en Turquía, ha manifestado unas líneas en política exterior más alienadas con Europa. «Esto incluye reafirmar la candidatura de Turquía para convertirse en miembro de pleno derecho de la UE y centrarse en reparar el historial de derechos humanos» en el país euroasiático, señala el analista Mohammad Salami, en el medio especializado en Asia The Cradle.

Según Salami, la oposición turca se volcaría en la situación interna del país y dejaría de lado la política exterior personalista, adquirida por Erdogan, lo que supondría rebajar la asistencia a Azerbaiyán. El analista apunta que es previsible que Ankara deje en manos de la Unión Europea la resolución del conflicto del Nagorno Karabaj, ya que incluso dentro de la oposición no existe una postura común sobre la disputa.

En este sentido, el principal partido en contra de la reelección de Erdogan, el Partido Democrático de los Pueblos (HDP), se opone abiertamente a las políticas de la formación del mandatario turco en el conflicto de Karabaj, además de mostrarse favorable a reconocer el genocidio de armenios de la Primera Guerra Mundial por parte del Imperio otomano.

Los resultados de las elecciones en Turquía, que se esperan reñidos, pueden suponer un cambio de actitud en Azerbaiyán que, de no salir Erdogan, «no podría sostener su beligerancia en un vecindario opuesto a las constantes escaladas», concluye el analista.