Madeleine McCann, la niña de tres años que desapareció en Portugal, en 2007
Nuevas pistas en el caso de Madeleine McCann conducen a la Policía a un embalse a 50 km de donde desapareció
Los buzos explorarán las profundidades de la presa, mientras que las zonas boscosas adyacentes también serán objeto de excavaciones
Nuevas pistas sobre la desaparición de Madeleine McCann han conducido a las autoridades de Portugal a registrar el embalse de Barragem do Arade, ubicado a 50 kilómetros de donde desapareció la menor y que frecuentaba el principal sospechoso, Christian Brueckner.
Agentes de la Policía lusa, junto con agentes británicos llevarán a cabo a partir de mañana nuevos registros en este embalse. Según revela Sky News, la investigación del lugar se produce a petición de la Policía alemana que, en junio de 2020, anunció que creía que Madeleine estaba muerta y que el sospechoso Brueckner, de nacionalidad alemana, era el probable responsable.
Al parecer, los buzos explorarán las profundidades de la presa, mientras que las zonas boscosas adyacentes al embalse también serán objeto de excavaciones. El embalse de Barragem do Arade ya ha sido escenario de dos operaciones de búsqueda anteriores.
Dos días después de que se denunciara la desaparición de Madeleine, un camionero afirmó haber visto a una mujer entregando a una niña a un hombre en la zona. Brueckner, con un largo historial de agresiones sexuales, solía frecuentar la zona.
De hecho, fue extraditado desde Portugal a Alemania en 2017 acusado de un caso de abuso sexual a menores en Grecia. Allí, en la cárcel germana de Wolfenbüttel cumple condena por otros delitos sexuales. En 2020, el fiscal alemán Hans Christian Wolters, responsable de la investigación de la desaparición de Madeleine señaló a Brueckner como posible autor de los hechos.
Las investigaciones sobre sus movimientos demostraron, por el rastro de su teléfono móvil, que se encontraba cerca del complejo vacacional donde se hospedaban los McCann la noche en que Madeleine fue secuestrada.
La menor británica desapareció cuando tenía tres años, mientras pasaba unas vacaciones en familia en Praia da Luz, en el Algarve, durante la noche del 3 de mayo de 2007, según las investigaciones.
Aunque no se ha podido acusar formalmente a Brueckner de la desaparición de Madeleine, los investigadores han llegado a decir en estos dos años de trabajo que «tienen pruebas concretas» contra él.