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El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y la primera ministra sueca, Magdalena AnderssonAFP

Suecia teme que se retrase su adhesión a la OTAN si Erdogan sale reelegido en Turquía

Estocolmo se plantea como fecha máxima abril de 2023, y aleja la posibilidad de pasar a formar parte de la Alianza este verano

Suecia no se muestra muy optimista con respecto a su adhesión a la Alianza Atlántica (OTAN). Estocolmo guardaba la esperanza de poder unirse a Finlandia lo antes posible y marcaban el verano como fecha clave. Pero, finalmente, es Turquía quien tiene la llave y la inminente reelección de Recep Tayyip Erdogan complica el futuro atlantista del país nórdico.

Fuentes del Gobierno sueco han declarado al periódico Dagens Nyheter que se está trabajando para revisar la fecha límite del 4 de abril del próximo año, cuando la OTAN celebre su 75º aniversario con una cumbre en Washington. Turquía mantiene el veto a Suecia, a quien acusa de acoger a «terroristas» y se niega a dar su brazo a torcer hasta que Estocolmo no extradite a quien Ankara considera enemigos del Estado.

Por su parte, el país nórdico ha declarado que es incapaz de satisfacer las demandas de Erdogan y se muestra ansioso por impulsar la adhesión antes de que se celebren las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el próximo año. Tobias Billstrom, ministro sueco de Asuntos Exteriores, se ha mostrado algo más optimista y ha declarado que cree que su país tenía posibilidades de superar los problemas antes de julio: «Estamos trabajando en ello todo el tiempo».

Entre bastidores, sin embargo, los funcionarios suecos muestran una actitud completamente contraria. Michael Claesson, jefe del Estado Mayor de la Defensa de Suecia, afirmó que el plazo más tardío era «razonable desde un punto de vista estratégico-militar».

Sin embargo, señaló que no sería prudente dejarlo más de un año porque las políticas de defensa suecas podrían acabar divergiendo de las finlandesas a medida que la OTAN prepara una nueva serie de planes para apuntalar su flanco oriental.

Las negociaciones entre Suecia y Turquía están estancadas desde el inicio de la campaña de reelección de Erdogan. Las opiniones varían sobre hasta qué punto podría suavizar su postura si sigue en el poder. Los funcionarios turcos han sugerido que podría aprobar la adhesión de Suecia a la OTAN si hace concesiones en sus demandas «antiterroristas».

Por su parte, los ministros suecos siguen insistiendo en que no pueden apoyarse en el sistema judicial para satisfacer los deseos de Erdogan. Por lo que, de ganar las elecciones de este domingo en Turquía –y todo parece indicar que así será– Suecia se aleja un poco más de su sueño atlantista.