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Imagen de una explosión en Belgorod, UcraniaAFP

467 días de guerra en Ucrania

El gobernador de Belgorod pide a la población que abandone sus casas para salvarse de los bombardeos

Más de 600 niños rusos ya han sido evacuados a provincias cercanas y otros serán trasladados a la península de Crimea que se anexionó Putin en 2014

La situación se complica y los habitantes rusos de Belgorod, en la fronteraccon Ucrania, padecen los ataques de grupos paramilitares opositores al Kemrlin. Aunque desde Moscú se intenta quitar hierro -o plomo- al escenario, el Gobernador de esta región rusa, Viacheslav Gladkov, decidió llamar a las cosas por su nombre y advertir a la población para que se aleja de la zona. Se dirigió en un mensaje a todos los residentes en la zona y les pidió que abandonen sus hogares.

«Hagan caso a las autoridades y abandonen provisionalmente sus casas para conservar lo más importante, que es su vida y la de sus seres queridos», aconsejó Gladkov en su canal de Telegram.

El funcionario -informa Efe- explicó que su llamamiento no incumbe solo al distrito de Shebékino, el más castigado por los ataques de los últimos días, sino a todos los distritos que están siendo objeto de bombardeos.

Precisó que durante la noche se sucedieron los ataques de la artillería ucraniana contra ese distrito y también el de Volokonovski, donde se registraron numerosos desperfectos, pero no víctimas mortales, según datos preliminares.

Más de 4.000 las personas que se encuentran ahora en centros de acogida

Estimó en más de 4.000 las personas que se encuentran ahora en centros de acogida, en su mayoría centros escolares y dormitorios universitarios.

Según Gladkov, dos mujeres murieron el sábado en las localidades de Nóvaya Tovolzhanka y Bezliúdovka, ambas en el distrito de Shebékino, y otros cinco civiles perecieron el viernes bajo fuego enemigo.

Estos bombardeos desde el otro lado de la frontera, sumado a las incursiones de grupos paramilitares rusos, han obligado al Ejército y a la Guardia Nacional a reforzar la seguridad en la zona entre crecientes críticas por la vulnerabilidad de la frontera.

Gladkov anunció el sábado la urgente evacuación de 600 niños de las localidades fronterizas, mientras otros mil serán enviados a la anexionada península de Crimea.