Sue Gray, la funcionaria que enterró a Boris Johnson, se unirá al Partido Laborista

Sue Gray, antigua funcionaria del Gobierno británico, podría pasarse a la competencia: baraja un cargo en el gabinete de Sir Keir Starmer. El líder Laborista quiere nombrarla jefa de Personal el próximo otoño, tras rechazar las restricciones que obligaban a Gray a esperar un año entero para poder acceder al cargo.

En marzo, Gray abandonó su puesto como alta funcionaria en el Ministerio de Igualación, Vivienda y Comunidades., para unirse al Partido Laborista. Su dimisión enfureció a los ministros y al servicio civil, y dio pie a una investigación del Cabinet Office, departamento responsable de apoyar al primer ministro.

Un informe elaborado por altos funcionarios había recomendado que Gray fuera excluida del cargo durante más de un año entero. Incluyó, además, una restricción adicional que impedía que la funcionaria se comunicase con el Gobierno durante seis meses. ¿La razón? Afirmaba que Gray violó el código del servicio civil al no actuar con honestidad, integridad e imparcialidad en su trato con Starmer y el Partido Laborista.

La imposición de 18 meses de restricciones habría tenido un impacto importante en los preparativos de Starmer de cara a las próximas elecciones generales, programadas para otoño de 2024. Sin embargo, el Comité Asesor sobre Nombramientos Empresariales (Acoba) contradijo la sentencia del Cabinet Office, y favoreció a los Laboristas: recomendó que Grey esperase sólo seis meses para unirse al bando de Keir Starmer, y criticó el informe inicial por su castigo «sin precedentes» a la exfuncionaria.

Sue Gray ha ocupado algunos de los cargos más altos en el servicio civil. Su momento más destacado fue cuando lideró la investigación sobre el escándalo del 'Partygate', pieza clave en la caída de Boris Johnson. Según concluyó Gray en mayo de 2022, muchas de las fiestas del Número 10 de Downing Street violaron la normativa sanitaria por el coronavirus. Fue ella quién condenó al ex primer ministro al afirmar que hubo «fallos de liderazgo» en la celebración de estos eventos, y asegurar que «el público tiene derecho a esperar los más altos estándares de su Gobierno, y está claro que lo sucedido quedó muy lejos de cumplir con estas expectativas».

Estrategia política

Se espera que los funcionarios públicos sean políticamente imparciales, y la decisión de Gray de abandonar el servicio civil después de recibir una oferta del Partido Laborista ha indignado a varios diputados conservadores. Según el periódico The Guardian, Gray también podría enfrentarse a imposiciones sobre lo que se le permite hacer una vez forme parte del Partido Laborista.

Muchos ministros y altos funcionarios, incluyendo a Simon Case, secretario de gabinete, han criticado a Gray, y afirmando que socavó la imparcialidad del servicio civil. Por su parte, el Partido Laborista acusa al Gobierno de llevar a cabo una vendetta contra la ex-funcionaria, y Starmer ha dicho que confía en que no ha violado ninguna norma antes de su nombramiento.

Los Laboristas están reclutando a otros funcionarios civiles, tanto actuales como antiguos, para ocupar cargos clave en la preparación de su campaña electoral. Sin embargo, ninguno de ellos tiene el rango suficiente ni ocupa actualmente un cargo que requiera pasar por el proceso de Acoba.

El portavoz de Starmer acusó a los Conservadores de intentar politizar el proceso, al iniciar una investigación de la Oficina del Gabinete sobre el nombramiento de Sue Gray. Más aún porque esta decisión, que no forma parte del proceso estándar, ha sucedido justo antes de las elecciones locales.

«El Partido Laborista apoya plenamente el proceso de Acoba, que consiste en que Sue Gray presente su formulario con la información solicitada por Acoba de la manera habitual», afirmó el portavoz. Agregó que era «extraño que el gobierno prefiera pasar tiempo discutiendo sobre una ex funcionaria pública 48 horas antes del día de las elecciones, en lugar de abordar los problemas que realmente importan a los votantes».