Rusia se revuelve contra el victimismo de Ucrania: expondrá sus armas destruidas en las embajadas occidentales

Vladimir Putin tiene que hacer enormes esfuerzos para digerir que la comunidad internacional, salvo sus escasos aliados, le vea como un monstruo y a Volodimir Zelenski como una víctima suya.

La cumbre de la OTAN y el compromiso renovado con Ucrania han venido a echar más sal a la herida abierta de su fracasada Operación Militar Especial. Moscú ha advertido que todo tendrá consecuencias y el expresidente Dimitri Medvédev insiste en que «la Tercera Guerra Mundial está cada vez más cerca». Así las cosas, el Kremlin quiere mostrar al mundo que Ucrania no es un angelito.

Por esa razón, analizan la posibilidad de exponer el equipo militar destruido durante su invasión, frente a las embajadas de países occidentales que suministraron ese armamento a Kiev. El anuncio –informa Efe– lo ha hecho el presidente de la Duma de Estado, Viacheslav Volodin.

Consultas a Defensa

Volodin encargó al Comité de Defensa de la cámara baja iniciar consultas con el Ministerio de Defensa para la organización de las respectivas exposiciones, señala la Duma en un comunicado publicado en su web.

«Es extremadamente interesante la propuesta de colocar el equipo quemado al lado de las embajadas que las suministran a Ucrania», señaló.

Previamente, durante un debate en la cámara baja, el diputado comunista Vladímir Isákov señaló que los tanques alemanes quemados durante la Segunda Guerra Mundial eran expuestos en Moscú.

«Ahora nuestros chicos combaten heroicamente, rechazan la ofensiva del enemigo (...). Creo que sería lo propio pedir al Ministerio de Defensa que haga una exposición como esa, de armamento quemado», dijo el legislador.