Rusia/Sudáfrica
El presidente de Sudáfrica se resiste a detener a Putin porque declararía la guerra
El presidente de Sudáfrica tiene un problema y su nombre es el mismo que mantiene al mundo preocupado: Vladimir Putin. Cyril Ramaphosa ha pedido a la Corte Pernal Internacional (CPI) que le permita a Putin, de manera excepcional, viajar a Johannesburgo y le exima a su gobierno de ejecutar la orden internacional de detención contra el causante de la invasión a Ucrania.
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Ramaphosa ha invitado a Putin a la cumbre de los BRIC (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y aunque todavía no ha recibido la respuesta positiva del Kremlin quiere evitar cualquier conflicto que desemboque, como advirtió Moscú por medio del expresidente Medvedev, en conflicto mundial.
Sudáfrica tiene problemas evidentes para ejecutar una solicitud de arresto y entregar al presidente PutinCyril Ramaphosa, presidente de Sudáfrica
«Rusia ha dejado claro que arrestar a su presidente en ejercicio sería una declaración de guerra», advirtió Ramaphosa. Dicho esto, admite lo delicado de la situación y el conflicto que le genera. «Sudáfrica tiene problemas evidentes para ejecutar una solicitud de arresto y entregar al presidente Putin».
La excepción
El anfitrión de la cumbre, que se celebra este mes de agosto, ha recurrido a un artículo de la Corte Penal Internacional que concede excepciones en la aplicación de estas órdenes de busca y captura internacionales. De momento, la respuesta que ha recibido ha sido negativa.
Habría una solución que permitiría a Putin participar: que lo hiciera en remoto, por vídeo conferencia. Pero esta opción no parece muy verosímil ya que a ojos de la Federación Rusa, su presidente quedaría como un criminal de guerra y el discurso de consumo interno es que Rusia, no está en guerra. Y, por supuesto, su presidente es un héroe que ejecuta una Operación Militar Especial para desnazificar Ucrania, un país que insiste en considerar como una provincia propia.
Las causas contra Putin
En la CPI a Putin le espera una colección de acusaciones por crímenes de guerra variada. Desde atacar deliberadamente objetivos civiles al secuestro de menores para reeducarlos en territorio ruso, permitir las torturas y ejecuciones sumarísimas, sepultamientos ocultos de centenares de cadáveres NN (No Name) en Ucrania además de utilizar material bélico prohibido internacionalmente.
Sudáfrica, a diferencia de Estados Unidos, China y Rusia, suscribió el estatuto de Roma la Corte Penal Internacional
El problema de Cyril Ramaphosa es que Sudáfrica, a diferencia de Estados Unidos, China y Rusia, suscribió el estatuto de Roma la Corte Penal Internacional y está obliga a cumplir sus órdenes.
Su recurso en base al artículo 97 que exime del cumplimiento del arresto por problemas mayores e impoderables, no parece que vaya a tener un final feliz. El fiscal desprecia las amenazas de una guerra aunque la vista se celebrará este viernes donde se conocerá la resolución final adoptada.
El caso de la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, es diferente. Ella pudo asistir a la cumbre UE-Celac porque no existe una orden de captura internacional en su contra. Otra cosa son las laxas normas de Bruselas.