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Yevgeny Prigozhin en el desafiante vídeo en el que declaró la guerra al Kremlin el pasado mes de junioAFP

546 días de guerra en Ucrania

La última maniobra de Prigozhin que acabó con la paciencia del Kremlin y precipitó su desenlace

Prigozhin trataba de recomponer las estructuras del Grupo Wagner y fortalecer su presencia en África

Las últimas maniobras emprendidas por el líder del grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, para impedir la destrucción del Grupo Wagner tras el fracasado motín del pasado mes de junio habría precipitado su eliminación.

Prigozhin falleció el miércoles cuando el avión en el que viajaba –junto a su número dos, Dmitry Utkin, y otros líderes de Wagner– se estrelló en la región rusa de Tver.

Pocos dudan ya de que se ha tratado de una ejecución ordenada desde el Kremlin y cada vez hay más indicios de que el aparato fue derribado por una batería S-300.

Según el Institute for the Study of War (ISW), el asesinato de Prigozhin y de la cúpula de Wagner sería el último paso para destruir a Wagner como grupo independiente.

Desde la rebelión, el aparato mediático y propagandístico inicio un proceso de silenciamiento de Prigozhin y minó sus capacidades de reclutar nuevo personal.

La falta de financiación y la salida del campo de operaciones ucraniano llevó a Wagner a un proceso paulatino de pérdida de combatientes, al mismo tiempo que Prigozhin perdía poder político.

Según una fuente interna de los servicios de seguridad rusos (GRU) a la que tuvo acceso el ISW, la presencia de Prigozhin en África, desde donde difundió un vídeo, días antes de morir, tenía como objetivo, precisamente, contrarrestar los esfuerzos de los servicios secretos rusos por destruir las estructuras de Wagner en el continente africano y sustituirlo por nuevos grupos de mercenarios controlados directamente por el Kremlin.

Prigozhin se rebeló contra ese plan y aseguró que «haría todo lo posible para frustrarlo». Fue entonces cuando Prigozhin inició un nuevo proceso para que Wagner fortaleciera sus estructuras en África, e incluso trató de impulsar una nueva campaña de reclutamiento.

Sería esa oposición del líder de Wagner a la desaparición de su grupo de mercenarios, y sus gestiones para reclutar nuevos efectivos y fortalecer sus estructuras en África en contra de los planes del GRU lo que finalmente habría acelerado los planes para eliminar a Prigozhin.