Un Modi satisfecho culmina con una vuelta de honor la cumbre del G20 de la India
Este baño de masas al que quiso someterse voluntariamente el primer ministro contrasta con la postura que suele mantener ante los medios
Saludando con la mano en alto y una sonrisa en la cara a una masa de periodistas que aguardó casi dos horas para verle, el primer ministro indio, el nacionalista hindú Narendra Modi, culminó la cumbre del G20 con una vuelta de honor por el centro de convenciones desde donde este fin de semana se informó de las negociaciones de Los Veinte.
«Modi, Modi, Modi», corearon los cientos de asistentes en cuanto el mandatario indio se asomó por la puerta y paseó a escasos centímetros de la prensa, con los que tradicionalmente se muestra esquivo, y ante los que en esta ocasión se apresuró a mostrarse satisfecho por los éxitos de la Presidencia de la India en el G20, aunque no ofreció declaraciones.
Antes de la llegada del mandatario, el recinto fue sometido a exhaustivas medidas de seguridad por el personal de la cumbre, que creó un amplio perímetro de seguridad para separar a Modi de los periodistas, y paseó a perros antiexplosivos por todos los rincones del edificio.
«Ni se os ocurra cruzar el cordón de seguridad», gritó uno de los miembros de seguridad a varios periodistas, que en el momento en el que se impusieron las medidas en la sala, dejaron de tener la oportunidad de salir del reciento.
Este baño de masas al que quiso someterse voluntariamente el primer ministro contrasta con la postura que suele mantener ante los medios, a los que no ha concedido ninguna rueda de prensa en la India desde que llegó al poder en 2014.
Modi únicamente ha realizado una conferencia de prensa desde entonces, el pasado marzo, junto con el presidente estadounidense Joe Biden con motivo de una visita oficial a Estados Unidos.
El mandatario indio nunca ha respondido a preguntas de periodistas fuera de ambientes controlados y sus interacciones se han limitado a unas pocas entrevistas, ofrecidas a unos pocos medios vistos como simpatizantes o próximos al gobierno del BJP, la formación de Modi.
La vuelta de honor de Modi se produjo horas después de que cediese el testigo de la presidencia de Los Veinte al presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo país organizará la cumbre de líderes del G20 en noviembre del próximo año.
La reunión de dirigentes de las principales economías del mundo concluyó este domingo en Nueva Delhi, con la satisfacción de la India de haber sido capaz de encontrar el consenso entre los miembros para alcanzar un acuerdo conjunto que antes de su inicio parecía improbable por las posturas enfrentadas en torno a la guerra en Ucrania.
Sin consenso, la cumbre de Nueva Delhi se habría convertido en la primera en concluir sin una declaración conjunta.
No obstante, los países del grupo alcanzaron un texto que todas las partes consideraron un éxito, con Occidente defendiendo que suponía un progreso con respecto a la cumbre de Bali (Indonesia) celebrada hace un año, y Moscú sosteniendo que el comunicado no mencionaba a Rusia en lo relativo al conflicto.