La cuenta atrás para Gaza llega a su fin: Israel lanza un ultimátum para evacuar a un millón de personas

Aúltima hora del jueves, Israel lanzó un ultimátum e insto a la población del norte de la Franja de Gaza a abandonar la zona norte. El tiempo para llevar a cabo esta evacuación, de más de un millón de personas, es limitado: 24 horas. Un intervalo de actuación que está llegando a su fin.

Naciones Unidas ha advertido que una operación de estas dimensiones con tan poco tiempo de margen es «imposible» de llevar a cabo sin que tenga «consecuencias humanitarias devastadoras». Ante esta situación, la ONU ha hecho un «firme llamamiento» a que esta orden «sea rescindida para evitar que una situación que lo que ya es una tragedia se convierta en una situación desastrosa».

Sin embargo, Israel no da marcha atrás e insiste en que el tiempo no corre a su favor. La incursión terrestre del Ejército hebreo es cada vez más inminente. El grupo terrorista Hamás ha instado a su población a que ignore la alera y ha calificado el ultimátum de «falsa propaganda».

«Nuestro pueblo palestino rechaza la amenaza de los líderes de la ocupación (israelí) y sus llamados a dejar sus casas y huir hacia el sur o Egipto», afirmó Hamás en un comunicado. Ambos lados están dispuestos a enfrentarse, poniendo en juego la vida de los civiles.

El propio primer ministro israelí, Benjamín Betanyahu, prometió destruir a Hamás, tras reunirse el jueves en Tel Aviv con el secretario del Estado estadounidense, Antony Blinken.

«Así como el EI –grupo yihadista Estado Islámico– fue aplastado, Hamás será aplastado», afirmó Netanyahu, una declaración que parecía anticipar una ofensiva terrestre en Gaza contra la milicia fundamentalista. En este sentido, Blinken ratificó su apoyo a Israel aunque llamó a considerar las «aspiraciones legítimas» de los palestinos.

«Mientras Estados Unidos existe (...), siempre estaremos a su lado», afirmó tras reunirse con Netanyahu. Blinken mencionó las «posibilidades» de abrir pasos seguros para los civiles «que desean abandonar la zona o buscar refugio». En este sentido, Washington ha declarado que evacuar a un millón de civiles del norte de la Franja de Gaza es una «tarea complicada».

Reacciones en el mundo árabe

Mientras tanto, la guerra entre Hamás e Israel está haciendo tambalearse al resto del mundo árabe. En Jordania, donde Blinken continúa su gira para intentar contener esta crisis, el Rey Abdalá II advirtió contra «cualquier intento de desplazar» a los palestinos.

La Liga Árabe estimó que la orden de evacuación israelí es «un crimen que supera el entendimiento», y el presidente ruso, Vladimir Putin, declaró que una incursión terrestre de Israel en la Franja de Gaza provocaría «pérdidas inaceptables entre los civiles» palestinos.

Israel, además de los bombardeos masivos, ha desplegado decenas de millas de soldados cerca del enclave y en la frontera con Líbano, en el norte, país desde el cual el Hezbolá proiraní, aliado de Hamás, lanza cohetes.

A esta temible ecuación también se suma Irán, que advirtió que Estados Unidos «debe controlar a Israel» si quiere evitar una guerra regional, en palabras del ministro de Relaciones Exteriores, Hossein Amir Abdollahian, durante una visita al Líbano.

En varios países de la región, miles de personas se manifestaron en las capitales de Irak, Irán y Jordania en apoyo a los palestinos.