El plan a largo plazo de Kiev: convertirse en el arsenal de armas de la Unión Europea

Kiev lleva más de dos años dependiendo del apoyo y armamento europeo para enfrentar la invasión de Rusia en su territorio. Sin embargo, su plan a largo plazo – una vez forme parte de la Unión Europea—sería convertirse en el proveedor de armas mayoritario del bloque.

Ucrania quiere atraer a contratistas de defensa para invertir localmente y contribuir a la creación de una industria armamentística moderna, en lo que se ha convertido en un dramático caso práctico en tiempo real. Así lo confirmó Oleksandr Kamyshin, ministro de Industrias Estratégicas de Ucrania, al medio POLITICO.

La estrategia implica un cambio en la producción: «El mundo libre debería producir los recursos suficientes para protegerse», afirmó Kamyshin, añadiendo que la manera de lograrlo es aumentar la producción y trasladarla allí donde sea necesaria, cerca de las líneas del frente. El plan consiste en conseguir que actores de defensa importantes, como la empresa alemana Rheinmetall, firmen acuerdos de negocios, contrarrestando así los pactos que Rusia ha establecido con países como Irán y Corea del Norte para abastecer a su ejército.

La demanda existe: Kiev desea centrarse en vehículos blindados, munición y drones, con la mirada puesta en la producción a largo plazo. «Lo que sucede ahora en Israel demuestra y prueba que la industria de la defensa a nivel global es un buen objetivo para las inversiones en las próximas décadas», señaló Kamyshin, y agregó que incluso si la guerra terminara mañana, Rusia podría volver siempre.

El canciller alemán Olaf Scholz y el primer ministro ucraniano Denys Shmyhal anunciarán formalmente un nuevo proyecto de defensa conjunto entre Rheinmetall y Ukroboronprom, la empresa estatal de defensa de Ucrania, centrado en vehículos blindados. El anuncio se realizará durante el Foro Empresarial Germano-Ucraniano en Berlín.

El Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenski, declaró recientemente que su gobierno «está listo para ofrecer condiciones especiales a las empresas dispuestas a desarrollar la producción de defensa». Y Armin Papperger, CEO de Rheinmetall, mostró su entusiasmo respecto a los planes de construir el próximo tanque Panther en Ucrania, aunque la producción apenas superará cien unidades al año.

Según Kamyshin, las empresas alemanas buscan iniciar el mantenimiento, las reparaciones y las operaciones locales de las armas que enviaron a Ucrania. La siguiente etapa sería el ensamblaje y la fabricación en Ucrania, lo que Kamyshin describió como un «desarrollo lógico de las relaciones» entre Berlín y Kiev.

Aunque, de momento, esta asociación empresarial se centrará inicialmente en la reparación y mantenimiento de vehículos blindados, transitará posteriormente al ensamblaje y más tarde a la producción y fabricación de vehículos blindados entre Rheinmetall y Ukroboronprom.

En declaraciones al Financial Times, el primer ministro ucraniano, Denys Shmyhal, afirmó: «Tenemos un enorme déficit de munición no solo en Ucrania, sino en todo el mundo. Entendemos que deberíamos producir esto aquí en Ucrania, porque en el resto del mundo se ha agotado. Todos los almacenes están vacíos».

El gobierno ha aprendido de su aumento drástico en la fabricación de drones domésticos: pasó de unas pocas docenas el año pasado a decenas de miles este año. Kiev también está reorientando su presupuesto para concentrarse en el complejo de defensa militar, incluyendo la defensa aérea y la artillería.

Su último éxito fue convertir los obsoletos misiles aire-aire AIM-9 Sidewinder de EE. UU. en misiles tierra-aire, un área de necesidad crítica dado que Rusia continúa lanzando ataques en ciudades lejanas al frente. Estos proyectiles reutilizados ayudarán a Ucrania a superar el invierno, ya que se espera que Rusia bombardee su infraestructura energética para sumir al país en la oscuridad.