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Grisha yakubovich, último oficial del ejército israelí que salió de Gaza en 1994Cortesía

Entrevista al último oficial del Ejército israelí que salió de Gaza en 1994

Grisha Yakubovich: «Israel construyó parte del Hospital Al-Shifa que ahora Hamás usa como póliza de seguro»

El coronel israelí fue el último alcalde de Gaza y se desempeñó como tal entre 1988 y 1994, como representante de la Administración Civil israelí

Hoy, para Israel, el hospital Al-Shifa es sinónimo de comandancia de Hamás, aunque está claro que eso ocurre más que nada bajo tierra y que sobre la superficie, el lugar funciona realmente como un hospital. Pero hay israelíes que recuerdan otra cosa, porque conocen de cerca el Al-Shifa de tiempos muy distintos.

El trasfondo es el hecho que en junio de 1967, al repeler el ataque de Egipto en el frente sur en la Guerra de los Seis Días, Israel conquistó, entre otros territorios, también la Franja de Gaza. Esa situación no pasaba solamente por el control militar, sino que imponía además una responsabilidad de Israel como poder ocupante respecto a la población palestina de dicha zona.

Quien recuerda muy bien parte de aquella época es el coronel (hoy en la reserva) Grisha Yakubovich, el último oficial del Ejército israelí que salió de Gaza al coger el poder la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en 1994. Fue el último alcalde de Gaza y se desempeñó como tal entre 1988 y 1994, como representante de la Administración Civil israelí.

Grisha yakubovich, último oficial del ejército israelí que salió de Gaza en 1994Grisha Yakubovich

Aunque comenta con amargura la situación de la guerra actual y la muerte que los terroristas sembraron el 7 de octubre en el sur de Israel, también halla un minuto para recordar con una sonrisa que «seguramente soy el único israelí por el que hay en Gaza un palestino que lleva su nombre». Todo se remonta a los tiempos en los que las relaciones eran distintas. Aunque aquel niño, cuyos padres le dieron el nombre de un oficial israelí, es hoy ya un adulto, el entrevistado no quiere exponerlo y no da su apellido «Se llama Grisha, como yo, es lo único que puedo decir».

Lo que no inspira ninguna sonrisa es abordar el tema tan candente del hospital Al-Shifa hoy, que Israel ve como símbolo del uso por parte de Hamás de instalaciones civiles para el terrorismo, y la que Grisha Yakubovitch recuerda de años atrás.

«Conozco muy bien el Al-Shifa personalmente, estuve allí por lo menos 100 veces, si no 200», confiesa a El Debate. «Yo acompañé personalmente a los contratistas que iban a construir el edificio número diez de los que se fueron agregando a la estructura original». En aquel momento no había túneles ni estructuras armadas. El Al-Shifa funcionaba solamente como un hospital.

«Hoy, trágicamente, tanto el Al-Shifa como los demás hospitales son abusados por Hamás», acusa Grisha. «Nosotros hacemos todo para proteger a nuestra población mientras ellos no sólo es que actúen justamente al revés sino que utilizan el lugar más vulnerable, un hospital, como póliza de seguro, porque saben que allí Israel no atacará».

Vuelve al pasado y recuerda, poniendo las cosas en la proporción debida: «Durante su administración de Gaza, Israel se preocupó por mejorar la situación de la población palestina. No le hizo un favor sino que actuó de acuerdo a lo determinado por el Derecho Internacional en cuanto a las obligaciones del país ocupante. Pero lo hicimos como se debía, con la mejor de las intenciones».

Explica que los fondos de los impuestos recaudados de la población se invertían totalmente en la Franja de Gaza, siendo precisamente el desarrollo del hospital Al-Shifa uno de los destinos claros del dinero. «Nosotros ocupamos la Franja de Gaza en 1967 y nuestra obligación era ocuparnos de la población y brindarles el mejor sistema salud posible entonces. Quien desarrolló y propulsó el sistema de salud palestino fuimos nosotros, tanto en Gaza como en Cisjordania».

Hoy, lamenta sobremanera ver que «el actual gobierno en Gaza, Hamás, prefirió dedicar todos sus recursos al terrorismo y no al bien de la población».