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Un militar israelí en la Franja de GazaTwitter IDF

Israel consolida su control en el norte de Gaza y ya prepara la «segunda etapa» de la guerra contra Hamás

La Fuerzas de Defensa israelí continúan las operaciones de reconocimiento en el hospital Al-Shifa, donde ha recuperado el cuerpo sin vida de dos rehenes

El Ejército israelí continúa con su operación terrestre en la ciudad de Gaza donde, aseguran, ya mantienen prácticamente un control total del terreno y están «cerca de desmantelar» el sistema militar de Hamás en el norte de la Franja. Los principales esfuerzos de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) siguen concentrándose en el mayor hospital del enclave, el Al-Shifa. El Gobierno de Benjamin Netanyahu insiste que, bajo sus instalaciones, se encuentra la base central de operaciones de la organización terrorista.

Precisamente, a última hora de ayer, y tras dos días de incursiones, las FDI anunciaron que habían hallado una red de túneles de Hamás en el hospital Al-Shifa, además de material militar, como fusiles Kalashnikov y lanzacohetes. «Los combatientes de las FDI continuaron operando esta noche en la Franja de Gaza, aviones de combate atacaron numerosos objetivos terroristas», informó el Ejército israelí. Israel ha emprendido lo que ya se ha bautizado como la «guerra de los hospitales». No solo el Al-Shifa, donde permanecen alrededor de 650 pacientes y miles de desplazados, ha estado sometido a los continuos ataques israelíes, sino que también están en el punto de mira el hospital de Rantisi y el Al Ahli.

Mientras las tropas del Estado judío avanzan y peinan la Franja de Gaza van saliendo a la luz los horrores de la guerra. Israel ha podido identificar el cuerpo de una soldado de apenas 19 años, Noa Marciano, secuestrada por Hamás, durante la masacre del pasado 7 de octubre, que acabó con la vida de 1.200 personas. «Tras un proceso de identificación realizado por personal médico militar y del rabinato, representantes de las FDI informaron ayer a su familia que su cuerpo fue extraído y devuelto a territorio israelí», ha informado este viernes la institución castrense.

El cuerpo fue hallado en una estructura adyacente al hospital Al-Shifa, donde el Ejército israelí proseguía sus operaciones la madrugada de este viernes. Este anuncio se produce poco después de que Israel comunicara también que se había encontrado el cadáver de Yehudit Weiss, una mujer israelí de 65 años, enferma de cáncer, secuestrada durante el fatídico «sábado negro». Netanyahu, que enfrenta una fuerte presión para conseguir la liberación de los 239 rehenes en manos de Hamás, ha defendido, en una entrevista con CBS News, que había «fuertes indicios de que había rehenes en el hospital Al-Shifa en Gaza».

La posibilidad de encontrar a los rehenes «fue una de las razones por las que entramos al hospital Al-Shifa», declaró el primer ministro israelí. Hamás, por su parte, asegura que los bombardeos israelíes ya han matado a unos 60 rehenes y los familiares de los secuestrados han perdido la paciencia con el Ejecutivo de Netanyahu, al que le reclaman más acciones para conseguir la liberación de los israelíes cautivos en Gaza. Las negociaciones para la liberación de un reducido grupo de secuestrados se eternizan y centenares de allegados han iniciado una marcha de cinco días, desde Tel Aviv hasta Jerusalén, a modo de protesta contra el Gobierno israelí.

A medida que las tropas israelíes consolidan su control en el norte de Gaza, se abre un nuevo debate sobre si el Ejército debería comenzar ya su invasión en el sur, donde se refugian la mayor parte de los gazatíes que ya huyeron de los bombardeos del norte hace dos semanas. El jefe del Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, dejó claro el jueves que «si fuera por mí», avanzarían más hacia el sur. En esta misma línea se pronunció el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, que habló de llevar la guerra «a nuevas etapas», pero sin llegar a dar más detalles.

Estas declaraciones tienen lugar al mismo tiempo que Israel ha lanzado octavillas sobre cuatro comunidades al este de Jan Yunis, en el sur de Gaza, pidiendo la evacuación de los civiles, lo que hace temer una incursión militar. Sin embargo, la información es escasa, ya que el enclave palestino sufre, nuevamente, un total apagón de las comunicaciones. La situación en Cisjordania también se complica, tras casi tres semanas de guerra en la Franja. La Policía israelí ha informado de que ha frustrado un intento de atentado terrorista de Hamás cerca de Jerusalén. El Ejército israelí, además, ha llevado a cabo un ataque aéreo contra el campo de refugiados de Yenín, causando la muerte de tres personas e hiriendo a otras nueve.

La presión sobre Cisjordania es cada vez mayor. Como parte de un «operativo terrorista», Israel mantiene una redada a gran escala, que se extiende a múltiples barrios de la ciudad de Yenín, e incluye el asedio del hospital Ibn Sina. Desde el pasado 7 de octubre, tras la masacre de Hamás, unos 200 palestinos han muerto y más de 2.700 han resultado heridos en Cisjordania en incidentes violentos con las fuerzas de seguridad israelíes o los colonos judíos. En Gaza, más de 11.000 personas han perdido la vida y Naciones Unidas alerta de que los gazatíes se enfrentan a un alto riesgo de morir de hambre.