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Un trabajador chino que resultó herido en la explosión de una planta de níquel, en IndonesiaAFP

Asia

Al menos 13 muertos en una explosión en una planta procesadora de níquel en Indonesia

Una investigación preliminar reveló que la deflagración ocurrió durante los trabajos de reparación de una caldera

Al menos 13 personas han muerto y 38 han resultado heridas este domingo por una explosión en una planta de procesamiento de níquel de capital chino en el este de Indonesia, en la isla de Celebés, informó el complejo donde está la industria.

La isla de Celebés es un centro importante de producción de níquel, un mineral utilizado en las baterías de los vehículos eléctricos y en el acero inoxidable.

El accidente ocurrió alrededor de las cinco de la mañana del sábado en la planta de Indonesia Tsingshan Stainless Steel (ITSS), indicó un portavoz del complejo PT Indonesia Morowali Industrial Park en un comunicado.

El saldo de muertos aumentó de 12 a 13, indicó el portavoz a la AFP y precisó que hay 38 heridos. Según la misma fuente los fallecidos son ocho indonesios y cinco chinos.

El grupo chino Tsingshan Holding Group –que es el mayor productor de níquel del mundo y el mayor fabricante de acero inoxidable de China– posee una participación mayoritaria en la planta indonesia siniestrada.

Una investigación preliminar reveló que la explosión ocurrió durante los trabajos de reparación de una caldera cuando un líquido inflamable se incendió y provocó una deflagración que hizo que unos tanques de oxígeno cercanos también estallaran, agregó el portavoz.

El incendio fue controlado la mañana del domingo. La firma a cargo del parque industrial dijo estar «profundamente entristecida» por el desastre y que los restos de varias de las víctimas identificadas fueron enviados a sus lugares de origen.

Tomas de vídeo compartidos con la AFP muestran humo saliendo de la instalación, con rescatistas en el lugar mientras otros trabajadores miran.

En una imagen se ven los cuerpos de las víctimas encima de bolsas de cadáveres color naranja en uno de los centros médicos del complejo industrial.

«Sus rostros estaban quemados, sus ropas todas quemadas», contó un trabajador.