Los misiles Iskander-M son transportados por un vehículo con plataforma de lanzamiento
Estos son los nuevos y apurados acuerdos de defensa entre EE.UU. y Europa que reflejan su miedo a Rusia
En 2023 se han cerrado varios pactos militares históricos, que facilitan la presencia de las tropas americanas en territorio europeo
La invasión de Rusia a Ucrania, inciada en febrero de 2022, sembró el miedo en el continente europeo. Desde entonces y sobre todo en los últimos meses, los países del norte de Europa se han apresurado para refugiarse bajo el paraguas de seguridad de Washington.
Esto se manifiesta en una oleada de nuevos acuerdos de defensa entre EE.UU. y sus aliados en Europa del Norte, permitiendo la rápida implementación de tropas estadounidenses. ¿El motivo? La posible guerra rusa, extendida en caso hipotético por el resto del continente.
EE.UU., Canadá y Noruega
En una decisión histórica, el Consejo de Ministros de Defensa de la UE ha aprobado este año la participación de Estados Unidos, Canadá y Noruega en proyectos de la Cooperación Estructurada Permanente (Pesco).
Este acuerdo marca la primera vez que la UE permite la participación de países no miembros en colaboraciones militares específicas. Se centra principalmente en la movilidad militar, destacando la importancia de mejorar las infraestructuras de transporte para facilitar el movimiento del material militar a través de Europa. Esta cooperación refleja el esfuerzo por fortalecer las capacidades defensivas y la coordinación entre los ejércitos europeos y sus aliados transatlánticos frente a la creciente tensión global.
Infraestructuras para la movilidad militar
Este acuerdo, impulsado por la OTAN, enfatizó la necesidad de adaptar las infraestructuras de transporte en Europa para el movimiento de material militar.
Desde el fin de la Guerra Fría, muchas infraestructuras europeas se han construido con propósitos civiles, sin considerar las necesidades militares. Este enfoque cambia ahora, buscando asegurar que las carreteras y ferrocarriles puedan soportar y facilitar el desplazamiento de equipos militares pesados.
Es un acuerdo clave para la logística y la capacidad de respuesta rápida en situaciones de crisis, mejorando así la eficacia de las maniobras militares y la cooperación entre los países de la OTAN.
Acuerdos EE. UU. y países nórdicos
En diciembre de 2023, Estados Unidos firmó acuerdos de defensa con seis países nórdicos: Suecia, Finlandia, Dinamarca, Estonia, Letonia y Lituania.
Estos pactos multianuales permiten la rápida implementación de tropas estadounidenses en estos países, facilitando operaciones de entrenamiento y despliegues en situaciones de emergencia.
Se trata de una respuesta europea a las tensiones crecientes con Rusia, más cercana a esos territorios que a los del Oeste del continente, y supone un cambio significativo en la política de defensa de la región. Los acuerdos reflejan la necesidad de reforzar la seguridad en el norte de Europa y aumentar la presencia militar estadounidense para la disuasión y la defensa.
Acuerdo EE.UU. y Finlandia
El reciente acuerdo de defensa entre Estados Unidos y Finlandia es de los más notables, dado el contexto de la larga frontera de Finlandia con Rusia y las crecientes tensiones en la región.
Este pacto responde a la estrategia de Moscú de desestabilizar la frontera ruso-finlandesa y la reciente resurrección del Distrito Militar de Leningrado por parte de Rusia. El acuerdo permite una mayor presencia militar estadounidense en Finlandia, fortaleciendo así la seguridad y disuasión en la frontera más extensa de la OTAN con Rusia.
Acuerdo entre Alemania y Lituania
Alemania y Lituania firmaron un acuerdo para estacionar permanentemente 5.000 tropas alemanas en Lituania.
Este acuerdo refleja una importante intensificación de la cooperación militar y defensiva en el Báltico, una región clave en el contexto de la seguridad europea frente a Moscú.
La presencia permanente de tropas alemanas en Lituania es un claro mensaje de compromiso y solidaridad dentro de la OTAN.
Acuerdos Bálticos con EE.UU.
Lituania, Letonia y Estonia actualizaron sus acuerdos de defensa con Estados Unidos para reflejar los nuevos planes de despliegue militar de la OTAN, incluyendo el entrenamiento de tropas ucranianas y proyectos de cooperación cibernética.
Estos acuerdos mejorados abordan una vez más la presencia militar estadounidense en estos países, la cooperación en defensa cibernética y la defensa conjunta del Báltico. Refuerzan la capacidad de respuesta y la seguridad en la región del Báltico, una zona de particular importancia estratégica en el contexto de las crecientes tensiones con Rusia.