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Macron nombra primer ministro al titular de Educación, el más joven de la historia de Francia

El presidente francés inicia así una remodelación clave de su Gobierno con Gabriel Attal al frente del Ejecutivo

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha nombrado como primer ministro al titular de Educación, Gabriel Attal. Una decisión que no pilla a nadie por sorpresa, ya que era la figura que más sonaba en las encuestas, tras la dimisión ayer de Élisabeth Borne.

Attal, a sus 34 años, se convierte así en el primer ministro más joven de la V República y tiene la ardua tarea de relanzar el segundo mandato de Macron. Este anuncio pone fin a días de rumores sobre una profunda remodelación del Ejecutivo francés, tras un año tormentoso plagado de crisis políticas.

La aprobación de la polémica ley de inmigración, con los votos de las formaciones de derecha, entre las que se encontraba el partido de Marine Le Pen, Agrupación Nacional, causó un cisma en el oficialismo y acabó por sepultar la carrera de Borne.

Pero su liderazgo también ha estado marcado por la aprobación de la reforma de las pensiones, que provocó graves protestas durante tres meses por todo Francia, así como la rebelión de las banlieu, los barrios más empobrecidos del país.

A pesar de que la tecnócrata cumplió, diligente, todos los encargos de Macron, ha sido la primera en ser sacrificada en pos de mantener la estabilidad de su Ejecutivo. Francia se enfrenta a un año decisivo, con la vista puesta en los Juegos Olímpicos de París y unas elecciones europeas, que servirán de termómetro político interno.

Según una encuesta de Opinionway publicada el pasado mes de diciembre, el partido Agrupación Nacional, de Marine Le Pen, lidera los sondeos con un 27 % de los votos, seguido por el partido de Macron (19 %), de cara a los comicios del Parlamento Europeo.

Con la designación de Attal, Macron rompe con su patrón habitual, eligiendo un claro perfil político para Matignon. Pero, a su vez, con este nombramiento, el presidente galo admite la crisis de popularidad que atraviesa su gestión. El exministro de Educación se presenta como uno de los pocos rostros reconocibles de la «generación Macron», capaz de hacer resurgir de sus cenizas al Ejecutivo galo.

El nuevo primer ministro de Francia se perfila como una gran «estrella», que ha ido escalando posiciones, tras abandonar el Partido Socialista en 2016 para respaldar la candidatura presidencial de Macron.

Attal ha sido nombrado primer ministro de Francia llevándose por delante a grandes pesos pesados como el ministro del Interior, Gérald Darmanin, el ministro de Economía, Bruno Le Maire, y el ministro de las Fuerzas Armadas, Sébastien Lecornu.

Durante su labor al frente del Ministerio de Educación ha destacado por prohibir el uso de las abayas vestido suelto usado en gran parte del mundo musulmán– en las escuelas, así como la aprobación de una serie de medidas destinadas a mejorar el rendimiento académico de los alumnos.

El propio Attal explicó que su acción política está especialmente marcada por su vida personal. Abiertamente homosexual, ha denunciado que sufrió acoso y agresiones homófobas durante su adolescencia.