Fundado en 1910

Varias personas cruzan la valla en TexasRedes

La inmigración: el principal problema de EE. UU.

La última encuesta Gallup revela que las llegadas son el principal problema de los estadounidenses, por encima del Gobierno y la economía

Según la última encuesta de Gallup, la inmigración se ha convertido en el problema que más preocupa a los estadounidenses. Tanto es así, que ha superado incluso al manejo gubernamental y la economía.

Realizado del 1 al 20 de febrero, el sondeo reveló que el 28 % de los encuestados identificó la inmigración como el principal problema del país. Esta cifra representa un incremento significativo de 8 puntos en comparación con enero, cuando el 20 % de los participantes consideraba la inmigración como la principal inquietud.

El tema migratorio no ocupaba el primer lugar en la encuesta mensual de Gallup desde julio de 2019. En enero pasado, el 21 % de los encuestados señaló que el manejo gubernamental era la preocupación principal, pero en la última encuesta, este tema ocupa el segundo lugar con el respaldo del 20 % de los participantes.

En tercer lugar en importancia se encuentra la economía, con un 12 %, manteniendo la misma proporción que en enero.

Aumento significativo

Los republicanos siguen siendo el grupo más inclinado a priorizar la inmigración, con un 57 % considerándolo el problema principal en febrero, frente al 37 % en enero. En cambio, los independientes experimentaron un aumento del 16 % en enero al 22 % este mes, mientras que entre los demócratas no se observaron cambios significativos (del 9 % en enero al 10 % en febrero).

La encuesta también destaca que el 55 % de los estadounidenses considera que «el gran número de inmigrantes que ingresan ilegalmente a Estados Unidos» representa una amenaza crítica para los intereses vitales del país. Este porcentaje representa un récord en comparación con el año pasado, cuando el 47 % expresó la misma opinión, superando el máximo anterior del 50 % en 2004.

Estos resultados surgieron a dos días de las visitas del presidente Joe Biden y del expresidente Donald Trump a la frontera entre Texas y México, en Brownsville y Eagle Pass, respectivamente, donde abordarán el tema migratorio como parte de sus campañas rumbo a las elecciones presidenciales de noviembre próximo.

El asesinato de una universitaria agita aún más el debate migratorio

El reciente homicidio de Laken Hope Riley, una estudiante de 22 años en la Universidad de Georgia, presuntamente perpetrado por un inmigrante venezolano recién llegado, se ha convertido en un tema destacado que ha servido a los republicanos en las elecciones presidenciales, específicamente en contra de la política migratoria de la Administración Biden, según expertos.

El sospechoso, José Antonio Ibarra de 26 años, fue arrestado y acusado del asesinato mientras Riley corría por el campus el 22 de febrero pasado. En respuesta, congresistas republicanos han solicitado al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) que explique cómo Ibarra pudo ingresar y permanecer en el país. Pidieron una copia del expediente y explicaciones sobre la decisión de otorgarle la libertad condicional, enfatizando la «razón humanitaria urgente o beneficio público significativo» que respaldó esa decisión.

Problema fronterizo de cara a las elecciones

Ibarra llegó a través de la frontera con México en 2022 como parte de la ola masiva de migrantes que buscaban asilo en Estados Unidos. Tras su arresto, el gobernador de Georgia, Brian P. Kemp, un republicano, envió una carta al presidente Joe Biden exigiendo respuestas sobre el estatus migratorio de Ibarra y destacando la situación fronteriza de cada estado debido, según él, a la inacción de la Administración Biden.

El gobernador subrayó que ha desplegado a soldados de la Guardia Nacional en la frontera sur del país como medida para proteger a los ciudadanos, argumentando la necesidad de acciones estatales ante la percepción de falta de acción a nivel federal. Este incidente alimenta las crecientes tensiones en el debate sobre la política migratoria y la seguridad fronteriza en el escenario político estadounidense.