Israel revela nuevas imágenes del secuestro de un rehén israelí durante la masacre de Hamás del 7 de octubre

Más de seis meses después de la terrible masacre del 7 de octubre en Israel, aún siguen saliendo a la luz nuevas y macabras imágenes del ataque terrorista perpetrado por Hamás, que mató a 1.200 israelíes y en el que capturaron a más de 240. Ayer, Israel dio a conocer las imágenes que muestran el momento en el que Yarden Bibas, el padre del bebé Kfri Bibas también en manos de la organización terrorista, fue capturado.

En la grabación, se puede ver a Bibas con el rostro cubierto de sangre mientras sus captores intentan atravesar una multitud que rodea la moto en la que lo retienen. Los hijos de Bibas, Kfir y Ariel, se encuentran entre los rehenes más jóvenes que todavía mantienen Hamás en Gaza. Kfir tiene sólo un año. Su hermano tiene cuatro años.

«Vídeo publicado por primera vez: el terrible momento del secuestro de Yarden Bibas, padre de Kfir (un año) y Ariel (4 años) y esposo de Shiri, todos secuestrados el 7 de octubre a manos de Hamás. El mundo no puede quedar indiferente ante estas imágenes de Yarden siendo rodeado agredido y secuestrado», escribió la cuenta del Estado de Israel junto con las imágenes, pidiendo a la comunidad internacional una fuerte condena por estos hechos.

El caso de la familia Bibas, todos secuestrados por Hamás, fue uno de los que más repercusión obtuvo. La semana pasada, Ofri Bibas Levy, hermana de Yarden mostró su angustia. «Seis meses donde cada momento suyo podría ser su último y, quizás, ya lo haya sido», lamentaba Ofri en un encuentro con familiares y supervivientes conmemorando la festividad de la Pascua judía y con el objetivo de recordar a quienes faltan del kibutz Nir Oz.

La herida en Nir Oz sigue muy presente, donde los milicianos mataron a 40 vecinos y secuestraron a 77 de los que, tras más de medio año de guerra en el enclave palestino, más de la mitad continúan secuestrados. Además, según fuentes de Inteligencia de Estados Unidos, y como aludió Hamás hace semanas, la mitad de esos secuestrados ya estarían muertos.