«Free Palestine», la lista francesa para las europeas que sugiere la destrucción de Israel

Como si no fuera suficiente la labor de zapa efectuada por la formación de extrema izquierda La Francia Insumisa, que lleva años mimando al electorado musulmán más radicalizado –con notable éxito hasta la fecha– y más de siete meses adoptando elementos de lenguaje próximos a los de Hamás en relación con el con el conflicto en Gaza. Es más: el partido que lidera Jean-Luc Mélenchon ha colocado en plaza elegible –la séptima– y proyectado masivamente en los medios a la activista de origen palestino Rima Hassan, que no destaca precisamente por su moderación.

Pues bien, parece que no es suficiente: otro partido, la Unión de los Demócratas Musulmanes Franceses (Udmf), abiertamente islamista, presenta igualmente una lista de cara a las elecciones europeas del 9 de junio. Y lo hace con un logo que despeja cualquier duda acerca de sus intenciones: el territorio que hoy abarca a Israel, a Cisjordania y a la Franja de Gaza bordeado exclusivamente con los colores de la bandera palestina. Es decir, que hace suyo el famoso eslogan que pide la creación de un Estado palestino «desde el [río] Jordán hasta el Mediterráneo» y niega a Israel el derecho a su existencia.

Una línea que se especifica al adentrarse en el programa con el que la Udmf concurre a las elecciones, resumido en siete medidas choque: prohibición de la venta de armas y material militar a Israel, retirada de las organizaciones palestinas de la lista de organizaciones terroristas de la Unión Europea, entre ellas la Yihad Islámica o el Frente Popular de Liberación de Palestina, en posesión de un largo historial de inocentes europeos asesinados, el embargo de productos israelíes y prohibición de todo comercio con Israel, la prohibición para los ciudadanos europeos de alistarse en el Ejército israelí, «so pena de ser procesados por crímenes de guerra», y el cierre del espacio aéreo europeo a los aviones israelíes, de los puertos de la UE a los barcos israelíes y de las carreteras europeas a los transportistas israelíes. Nada menos.

Unas medidas que van acompañadas de justificaciones históricas algo curiosas, pues incumbe a Europa, y solo a ella, resolver el conflicto con Israel, de la que es culpable en su origen. Por dos razones, en opinión de los ideólogos de la Udmf. La primera: «Una tragedia [la palestina] que hunde sus raíces con los acuerdos Sykes-Picot firmados el 16 de mayo de 1916 entre Francia y el Reino Unido, y se intensificó en 1947, tras el genocidio de los judíos por la Alemania nazi, con un plan de partición de Palestina. Se trata, pues, de un problema esencialmente europeo, y huelga decir que Europa debe resolverlo».

La segunda, continuación de la primera: «Aunque el holocausto [con minúsculas] fue esencialmente responsabilidad de las potencias europeas [¿no era en exclusiva del nazismo?], tras la Segunda Guerra Mundial decidieron, a modo de reparación, hacer pagar al pueblo palestino, aunque fuera ajeno a estos horrores, sacrificando su existencia y su derecho a la autodeterminación».

Además de inscribirse en la más pura tradición no ya antisionista, sino antisemita, la Udms practica el reduccionismo histórico más ramplón: ni una referencia a las negociaciones entre Golda Meir y los árabes ya en 1947, ni a la división árabe en el momento en que Naciones Unidas presentó el plan de partición; tampoco a los gruesos errores militares de sus jefes en la guerra de 1948-49, ni siquiera, a la estrecha colaboración, en plena Segunda Guerra Mundial, del Gran Muftí de Jerusalén, con Hitler. Un solo culpable: Israel. Una sola responsable: Europa y su pasado.

La lista de la Udmf tiene pocas posibilidades de lograr un escaño el 9 de junio, pues el grueso del voto musulmán irá a La Francia Insumisa. Sin embargo, resultará interesante analizar su voto: según la universitaria Florence Bergeaud-Buckler, amenazada de muerte, la Udmf es una extensión de los Hermanos Musulmanes.