Sunak puede convertirse en el único primer ministro británico que pierde su escaño en unas elecciones

El futuro del primer ministro británico, Rishi Sunak, se va tiñendo de negro a medida que se acerca la fecha de las elecciones generales del Reino Unido, el próximo 4 de julio. Sunak, en un acto desesperado, decidió adelantar los comicios aferrándose a los buenos datos de inflación del pasado mes de mayo, sin embargo, la realidad se ha impuesto y su situación es cada vez más delicada. De hecho, el líder del Partido Conservador podría hacer historia, pero por un hito que no querría lograr: convertirse en el único primer ministro británico en funciones en perder su escaño, según apunta la última encuesta del diario The Daily Telegraph.

Pintan bastos para el Partido Conservador británico que, en todos los sondeos, se encuentra muy por debajo en intención de voto con respecto al Partido Laborista, de Keir Starmer. Incluso, la formación del populista Nigel Farage, Reform UK, podría convertirse en la segunda fuerza, según una encuesta elaborada, la pasada semana, por YouGov. De confirmarse estas predicciones, los tories sufrirían tal debacle que su presencia en la vida política británica se reduciría a la mínima expresión. Los pronósticos de The Daily Telegraph son también muy pesimistas para los conservadores británicos.

La encuesta, elaborada por el diario británico, ofrece una amplia victoria a los laboristas con 516 escaños –superando la victoria lograda por Tony Blair, en 1997–, frente a los 53 que obtendrían los tories. Pero, a diferencia del sondeo de YouGov, las previsiones de The Daily Telegraph dejan fuera a la formación de Farage. Así las cosas, si estos datos llegan a materializarse, el escaño de Sunak estaría en peligro y se confirman, por tanto, lo peores augurios de los conservadores sobre una «supermayoría» de los laboristas.

El ministro de Defensa británico, Grant Shapps, trató de movilizar a las bases tories, hace exactamente una semana, en una entrevista con Times Radio, para evitar una victoria arrolladora de la formación liderada por Starmer. «Hay que asegurarse de que en el próximo Gobierno, sea quien sea quien lo forme, haya un sistema adecuado de rendición de cuentas», advirtió entonces Shapps.

En su intervención, el ministro de Defensa británico subrayó que, de conseguir esa «supermayoría», «Starmer entrará en el Nº10 de Downing Street y el poder quedará de algún modo sin control». Sunak se mantiene en la carrera, pero consciente de que su lugar está, en el mejor de los casos, en la oposición. La siguiente batalla de los tories será elegir a quién sucederá al actual primer ministro británico, tras la arrolladora derrota que ya vaticinan todos los sondeos.