Kamala Harris en un acto reciente
Kamala Harris intenta acallar los rumores y dice estar «orgullosa» de ser la compañera de Biden
El 75 % de los encuestados opina que el partido estaría en una posición más fuerte si el nominado no fuera Biden
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, se esforzó este martes en disipar los rumores que la señalan como posible reemplazo del presidente Joe Biden en la carrera por la Casa Blanca, tras la percepción de una débil actuación del mandatario en el reciente debate contra el exmandatario republicano Donald Trump.
En una entrevista con la cadena CBS, realizada después de participar en un acto de recaudación de fondos en California, Harris expresó: «Estoy orgullosa de ser compañera de fórmula de Joe Biden». Con esta afirmación, la vicepresidenta buscó subrayar su compromiso con el presidente y su actual candidatura, tratando de calmar las especulaciones sobre un cambio de candidato en la contienda electoral.
Harris defendió nuevamente a Biden, como lo hizo la semana pasada tras el debate electoral, donde afirmó que el presidente tuvo un comienzo débil pero un final muy fuerte. Sin embargo, la actuación de Biden en el debate, caracterizada por un discurso titubeante y una voz insegura, ha encendido las alarmas dentro del Partido Demócrata. Muchos miembros del partido están cada vez más preocupados por la capacidad de Biden para enfrentarse a Trump y consideran la posibilidad de buscar un reemplazo que pueda consolidar mejor la candidatura demócrata y frenar el avance republicano.
Una encuesta reciente de la cadena CNN, publicada este martes, arroja resultados inquietantes para los demócratas. Si las elecciones se realizaran hoy con Biden y Trump como candidatos, el 49 % de los votantes apoyaría a Trump, mientras que el 43 % respaldaría a Biden. La encuesta también exploró un escenario hipotético en el que Harris fuera la candidata demócrata, mostrando que el 47 % de los votantes votaría por Trump y el 45 % por Harris.
Estos resultados reflejan una percepción generalizada entre los votantes de que el Partido Demócrata tendría mejores posibilidades con un candidato diferente. De hecho, el 75 % de los encuestados opina que el partido estaría en una posición más fuerte si el nominado no fuera Biden. Esta cifra pone de manifiesto una creciente desconfianza en la capacidad de Biden para ganar las elecciones y subraya la necesidad de una estrategia electoral robusta y efectiva por parte de los demócratas.
El debate sobre la candidatura demócrata se ha intensificado desde el desempeño de Biden en el debate, que muchos vieron como una oportunidad perdida para consolidar su liderazgo y contrarrestar el impacto de Trump. La presión para encontrar una solución viable es alta, ya que los demócratas buscan evitar un segundo mandato de Trump y asegurar la continuidad de sus políticas.
Además de la actuación de Biden en el debate, también se han planteado preocupaciones sobre su salud y su edad, ya que a los 81 años es el presidente más anciano en la historia de Estados Unidos. Estos factores han alimentado las discusiones sobre la posibilidad de que Harris u otro candidato demócrata tomen el relevo.
En este contexto, la afirmación de lealtad de Harris hacia Biden busca no solo disipar los rumores, sino también fortalecer la percepción de unidad y cohesión dentro del Partido Demócrata. Sin embargo, la situación sigue siendo delicada y el partido tendrá que tomar decisiones estratégicas cruciales en los próximos meses para asegurar una candidatura fuerte y viable que pueda competir eficazmente contra Trump.
