El líder supremo de Irán pide a los iraníes que acudan a votar para legitimar al régimen
El pasado viernes, la República Islámica registró la participación más baja desde su fundación en 1979 en unas elecciones, con tan solo un 39,9 %
La abstención ha sido el gran elefante en la habitación de las últimas elecciones en la República Islámica de Irán. Los iraníes han decidido mostrar su descontento y hastío con el régimen de los ayatolás no acudiendo a votar.
Para la República Islámica una alta participación es sinónimo de legitimidad y, ante este desafío cada vez más evidente, el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jameneí, ha pedido nuevamente a su pueblo que acuda a las urnas este viernes en la segunda vueltas de las elecciones presidenciales.
«Aquellos que aman al islam, a la República Islámica y el progreso del país deben demostrarlo participando en las elecciones», declaró, este miércoles, la máxima autoridad política y religiosa de Irán en una reunión con profesores de Teherán, según informó la agencia estatal IRNA. «La segunda vuelta de las elecciones presidenciales es muy importante», apostilló.
Por primera vez, Jameneí reconoció que la participación «fue más baja de lo esperado» en la primera vuelta, que tuvo lugar el pasado 28 de junio. Sin embargo, atribuyó este fenómeno a que «los votantes tienen problemas, trabajo y dificultades», lo que les lleva a no votar, recoge EFE.
Además, sostuvo que los que no votaron en la primera vuelta, un alto 60,1 % de los votantes, no tienen porque estar en contra de la República Islámica necesariamente.
«Es completamente erróneo asumir que aquellos que no votaron en la primera vuelta están en contra del sistema», añadió Jameneí.
El pasado viernes, Irán registró la participación más baja desde su fundación en 1979 en unas elecciones. Solo un 39,9 % de los votantes acudieron a las urnas, a pesar de las repetidas llamadas del líder supremo a votar.
Una cifra que ha ido descendiendo en los últimos años. En las elecciones parlamentarias de marzo votó un 41 % del electorado, mientras que en las presidenciales de 2021 lo hizo un 48 % y en las de 2017 participó 73,1 %.