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La sede del Parlamento Europeo en Bruselas, adornada para las eleccionesEFE

Juego de tronos en Bruselas: comienzan los nombramientos en el Parlamento Europeo

Los grupos políticos se disputaron las presidencias siguiendo una fórmula proporcional que otorga a los grupos más influencia en relación con su tamaño

Comenzó eligiendo el PPE, que presidirá las comisiones de Industria, Asuntos Exteriores, y Comité de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior (LIBE). Inicialmente, el PPE había reclamado presidir la comisión de Agricultura (AGRI), pero según fuentes del grupo, la intercambiaron con los Conservadores (ECR) a cambio de la presidencia de LIBE. Por su parte, los Conservadores (ECR) van a presidir las comisiones de Presupuestos y Peticiones, además de AGRI.

Los populares europeos decidirán el contenido y calendario regulatorio de políticas relativas a las energías renovables, la seguridad energética y potenciar la investigación y digitalización. Desde LIBE, los populares serán responsables de llevar una de las agendas más complicadas ahora mismo, para lograr formular leyes que afectan directamente a los ciudadanos europeos en términos de lucha contra la discriminación y el racismo, de cooperación judicial en asuntos civiles y penales, de política de asilo y migración en espacio Schengen, y de seguridad interior en la lucha contra el terrorismo y la delincuencia organizada. España tiene muchas cuestiones pendientes que afectan a estas competencias, si no que pregunten a las familias canarias o a las que viven en rutas costeras de los narcos.

La comisión de Agricultura y Desarrollo Rural queda en manos conservadoras (ECR), al timón de la Política Agrícola Común, que afecta a la producción agrícola, a los mercados y los pagos directos a los agricultores; también decidirá la asignación de fondos para mejorar la calidad de vida en áreas rurales. España se juega mucho en esta AGRI. Los conservadores lideran también PETI, la comisión que se encarga de investigar y dar seguimiento a las peticiones presentadas por ciudadanos y residentes de la UE sobre asuntos relacionados con la aplicación del Derecho de la Unión Europea por parte de las autoridades nacionales. Una nueva vía de pedir responsabilidades políticas al gobierno de España, central y autonómico.

El grupo Socialistas y Demócratas (S&D) presidirá las comisiones de Medio Ambiente (ENVI), la de Comercio Internacional, así como Asuntos Económicos y Monetarios (ECON), la de Desarrollo Regional y la de Derechos de la Mujer (FEMM). Los socialistas llevarán la agenda de cuestiones relacionadas con la política económica, el mercado único y la regulación financiera desde ECON, y desde ENVI propondrán políticas medioambientales, la salud pública y la seguridad alimentaria en la UE. Dirigirán también una comisión de largo alcance cualitativo, sobre la Mujer, que promueve la igualdad de género y los derechos de las mujeres en la Unión Europea, combate la discriminación de género, la violencia contra las mujeres, entre otras cuestiones. Es una Comisión transversal, su contenido vincula a todas las demás.

Los liberales de corte franco-Macrón Renew Europe buscan influir en materias jurídicas (JURI), de cooperación (DEBE) y defensa (SEDE). Así, llevarán la agenda en temas como la protección de datos, los procedimientos judiciales transfronterizos, (algunos cruciales para España); decidirán sobre la ayuda humanitaria de la Unión Europea (con impacto en Ucrania o Israel, por ejemplo); y finalmente serán quienes diseñen las políticas relacionadas con la seguridad y la defensa en el contexto de la UE, con temas como la cooperación en defensa entre los estados miembros, la política de armamento, y la evaluación de la capacidad militar conjunta de la UE (muy del gusto francés actual).

Los Verdes buscan liderar el comité de Mercado Interior y Protección del Consumidor y el subcomité de Derechos Humanos. La Izquierda, por su parte, aspira a presidir Asuntos Fiscales y Empleo y Asuntos Sociales.

El nuevo grupo Patriotas por Europa no cumplió con el plazo del 4 de julio para constituirse y debido a ese retraso en la formalización solo pudo reclamar presidir las comisiones de Transporte y Turismo (TRAN) y Cultura y Educación (CULT). Además de este tropiezo, es muy probable que la mayoría de los grupos políticos mantengan un más que cuestionable cordón sanitario contra este grupo, excluyéndolos de posiciones con verdadero poder en el Parlamento.

TRAN juega un papel fundamental en la configuración de políticas que afectan la movilidad y el turismo en toda la UE. Patriotas llevará la agenda de cuestiones importantes para la UE y para España en particular, como son la regulación del transporte terrestre, marítimo y aéreo, la infraestructura y seguridad del transporte, la seguridad en el transporte, entre otras cuestiones. Quizá es un momento para abordar la falta de comunicación de España con el resto de Europa que Francia siempre ha bloqueado. O se puede indagar en clave europea sobre el rescate español de Air Europa. La vida da muchas vueltas.

Por otro lado, CULT se ocupa de legislar y supervisar políticas relacionadas con la cultura, la educación, el multilingüismo, la juventud y el deporte. Otra buena oportunidad para lograr la atención de los jóvenes y su favor, poniendo sobre la mesa, medidas que mejoren los niveles educativos y su medición (informe PISA); o a evitar que un idioma nacional sea penalizado en partes de su territorio (caso del español en Cataluña).

Los nombramientos en el Parlamento Europeo no son meros formalismos. Más allá de simples juegos de poder, las presidencias de las comisiones tendrán consecuencias tangibles para todos los españoles. Cada movimiento y cada nombramiento cuentan.